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Un maestro de la repostería moderna
Diego Lozano, a sus 40 años, ha logrado posicionarse como uno de los chefs más destacados de Brasil, especialmente en el mundo de la repostería. Su enfoque innovador y su capacidad para convertir ingredientes en verdaderas obras de arte lo han llevado a ganar múltiples premios, incluyendo el prestigioso título de chocolatier en el World Chocolate Masters.
En 2023, fue reconocido como el mejor confeiteiro de São Paulo, un testimonio de su dedicación y talento.
Un sueño hecho realidad en la televisión
La carrera de Lozano dio un giro emocionante cuando se unió como jurado en el popular programa de televisión MasterChef Confeitaria.
Para él, participar en este reality show no solo es un honor, sino también una oportunidad para compartir su pasión por la repostería con una audiencia más amplia. «Siempre he sido un gran fan del programa y ahora que estoy aquí, no quiero irme», confiesa.
Su entusiasmo es contagioso, y su presencia en la segunda temporada ya está confirmada, lo que promete más sorpresas para los amantes de la cocina.
Creatividad sin límites en la cocina
En su restaurante Levena, considerado la mejor docería de São Paulo en 2024, Lozano se enfrenta al desafío de crear postres que sean tanto visualmente impactantes como deliciosos.
«Es un ejercicio constante entre lo creativo y lo comercial», explica. Su enfoque se centra en la estética de los platos, pero sin comprometer el sabor. Uno de sus mayores éxitos recientes es la famosa sobremesa «Eso No Es Una Banana», inspirada en la obra de arte del artista italiano Maurizio Cattelan.
Esta creación no solo ha capturado la atención del público, sino que también ha generado un fenómeno viral en las redes sociales.
Un compromiso con la repostería brasileña
Diego Lozano no solo busca innovar, sino que también está comprometido con la valorización de la repostería brasileña. A pesar de los desafíos, él cree firmemente en el potencial de los ingredientes locales. «Es más fácil que un extranjero se interese por nuestros productos que los propios brasileños», señala. Su misión es rescatar y resaltar los sabores autóctonos, como las diversas variedades de nueces, que a menudo son subestimadas. Además, Lozano anima a los aspirantes a chefs a seguir sus sueños en la repostería, aunque advierte que la dedicación y la práctica son esenciales para alcanzar la excelencia.
