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En Texas, un cliente insatisfecho lanza sopa caliente a la cara del gerente del restaurante. La mujer presentó cargos.
Un cliente descontento le arroja sopa caliente a un gerente de un restaurante
El comportamiento atroz de un cliente extremadamente infeliz fue captado por las cámaras el domingo y ahora está siendo investigado por la policía.
Janelle Browland, gerente de Sol de Jalisco en Temple, Texas, dijo que primero habló con la cliente frustrada a través del teléfono, pero luego la mujer se presentó en el restaurante, y fue entonces cuando las cosas se salieron de control.
«Le dije: ‘Señora, todavía puedo ayudarla’. Sólo le pido que no me hable de esa manera. Ella literalmente agarró la taza y me la lanzó en ese momento», dijo.
Todo inicia en el pedido
El incidente ocurrió el domingo después de que una mujer llegara a su casa con un pedido del Sol de Jalisco.
Se puso en contacto con el restaurante para quejarse de que la sopa que había pedido estaba tan caliente que derretía la tapa de plástico.
La mujer, que estaba maldiciendo, exigió hablar con un gerente. En ese momento ya estaba hablando con Browland por teléfono. Pero cuando la mujer continuó maldiciendo, Browland colgó.
La clienta volvió a llamar unos minutos después y quedó en espera mientras Browland ayudaba a otro cliente del restaurante.
Cuando la gerente volvió a coger el teléfono, la mujer se había ido.
La historia no termina ahí
«Unos minutos más tarde, fue cuando mi anfitrión vino a buscarme y me dijo: ‘Hay una señora aquí hablando de su pedido para llevar'», dijo Browland. «Y me dije: ‘Vale, ya está'».
Como ya había tratado con muchos clientes insatisfechos, estaba seguro de que podría manejar lo que esta mujer fuera a lanzarle. Pero no sabía que, literalmente, le iba a tirar sopa caliente.
Browland le dijo a la clienta que la ayudaría si dejaba de maldecir, pero la mujer no la escuchó. En lugar de ello, quitó la tapa de la sopa y arrojó su contenido a la cara de Browland.
Afortunadamente, la sopa no estaba tan caliente como cuando se sirvió, pero como era menudo, una sopa tradicionalmente picante, las especias quemaron los ojos de la encargada y le hicieron sangrar la nariz.
Browland presentó cargos contra el cliente.gerente
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