La tormenta y los tornados que azotaron seis estados entre ellos Missouri durante el fin de semana no han traído más que destrucción, lágrimas y pérdidas. Pero en medio de esta mortífera devastación, la comunidad de Missouri se topó con un inesperado rayo de esperanza: Un árbol de Navidad.
Cuando los miembros de la comunidad salieron a las calles para limpiar la zona, sorprendentemente vieron un solitario árbol de Navidad dentro de lo que quedaba de una casa.
El pastor Danny Lybarger de The Well, una congregación Metodista Unida que se reúne en la Cervecería Good News, dijo a People: «Hay una casa donde todo el frente fue arrancado.
Miras dentro y lo único que queda en pie es su árbol de Navidad con los regalos debajo». Y continuó: «Fue una interesante señal de esperanza. Era como si la estación quedara en pie».
El árbol de navidad que da esperanza al pueblo
Lybarger explicó que el hermoso árbol sigue siendo «lo más visible» desde una carretera cercana que animaba a los vehículos a «reducir la velocidad para mirarlo». La visión del árbol reconfortó a la ciudad, que comprensiblemente aún está procesando el desastroso resultado de los tornados en Missouri y otros estados.
«Lo que ocurrió fue trágico», dijo Lybarger añadiendo que una persona murió y otras dos resultaron heridas en Defiance.
El pastor anima ahora a la gente a unirse y ayudar a los necesitados. «La tragedia es una mierda, pero es increíble ver la forma en que galvaniza a la gente.
Impulsa a personas progresistas y conservadoras y a todo tipo de espectros religiosos y todo tipo de experiencias vitales», dijo.
La tormenta, que comenzó el viernes por la noche y terminó el sábado temprano, desencadenó tornados mortales en Arkansas, Kentucky, Illinois, Ohio, Indiana, Missouri, Mississippi y Tennessee. El número de muertos en Kentucky es ya de 74 y su gobernador lo calificó como «una de las noches más duras de la historia de Kentucky». 109 personas siguen sin ser localizadas, según el gobernador Andy Beshear.
Los estragos de los tornados
«Este es el evento de tornado más mortífero que hemos tenido», dijo el gobernador de 44 años al presentador de CNN Jake Tapper el domingo. «Creo que va a ser el evento de tornado más largo y mortífero de la historia de Estados Unidos». Entre los fallecidos se encuentra un niño de tres años que murió en brazos de su madre después de que su casa se derrumbara sobre ellos. «Sucedió tan rápido», dijo Huda Alubahi recordando la angustiosa calamidad.
«Los agarré (a los dos hijos) y me metí en el armario y cerré la puerta del mismo», dijo al reportero David Begnaud. Desgraciadamente, la casa se derrumbó sobre ellos, hiriendo a los tres pero hiriendo mortalmente a Jha’lil. «Y para cuando eso ocurrió todo estaba encima de nosotros. No podía moverme. Sentía como si todos los pisos y todo lo de arriba estuviera sobre mí». Y añadió: «Mi bebé, de un año, estaba llorando».
Afortunadamente, su hijo menor sobrevivió a esa prueba, pero su hijo mayor, trágicamente, no. «Nunca escuché a mi hijo de 3 años decir nada», compartió. «Él era algo especial», dijo recordando a su hijo fallecido. «Era perfecto».
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