Iyla Crawford, de siete años, se enfureció cuando su madre, Leanne King, le reveló que su travieso elfo le había hecho garabatos con delineador de ojos en su rostro mientras dormía.
Una madre se ríe de la reacción «diva» de su hija ante la broma del elfo
El 1 de diciembre, miles de elfos omniscientes se despliegan por todo el país para vigilar el comportamiento de los niños.
La tendencia comenzó en Estados Unidos, pero rápidamente se hizo popular aquí, con niños y padres obsesionados por el estrafalario personaje.
En el pasado, las acciones de los padres han dividido a la gente, y una madre fue acusada de ir «demasiado lejos» con una broma.
La reacción de una niña ante su elfo dejó a la gente histérica, después de que descubriera que el muñeco le había dibujado gafas y pecas en su cara.
Iyla Crawford, de siete años, no se dejó impresionar después de descubrir que el elfo le había hecho garabatos con lápiz de ojos mientras dormía el pasado martes por la mañana.
Las imágenes grabadas por su madre Leanne, que se ríe, captan a Iyla diciéndole con firmeza: «No, no me estoy riendo», mientras se sienta encorvada con las cejas, las pecas y «hola» escrito en la frente.
Luego pregunta frustrada: «No, ¿me ha dibujado la cara?», mientras mira incrédula al elfo de juguete que está en su mesita de noche.
El video se hizo viral
El divertidísimo vídeo se ha hecho viral en Twitter y Facebook, acumulando más de 1,3 millones de visitas desde que Leanne lo publicó esa misma mañana.
Leanne dijo que Iyla suele encontrar divertida cualquier broma del elfo, pero que esta se enfadó porque «siempre tiene que llegar limpia para ir al colegio».
Pero su hija ha perdonado desde entonces al elfo después de haberle quitado el maquillaje para evitar cualquier vergüenza en el aula.
Leanne, de Failsworth, Oldham, Greater Manchester, dijo: «Iyla es excesivamente dramática y bastante testaruda, y eso se nota en el vídeo. Me alegro de haberlo grabado. Muestra totalmente su lado de diva».
«El elfo de la estantería es algo muy importante para ella y ha crecido con él. Ella piensa que todo lo que hace es divertidísimo, pero estaba enfadada por esto. No estaba nada contenta. Me había olvidado de hacerlo antes de irme a la cama, así que cuando me desperté vi el lápiz de ojos en mi tocador y pensé en hacer esto. Ella tiene un sentido del humor muy divertido, así que sabía que reaccionaría.»
Además dijo: «No sé por qué pensé en hacer las gafas y el ‘hola’, simplemente lo hice rápidamente. Sólo me llevó un minuto».
«Ella cuida su imagen, así que cuando se despertó estaba preocupada por ir al colegio con algo en la cara. Tiene que estar inmaculada. La gente dice que no debería habérselo dicho y dejarla entrar en la escuela, así»
Y concluyó: «Ni siquiera me sentí culpable, para ser sincera. Sólo me pareció divertido. Se le pasó una vez que se limpió y vio el lado divertido, pero le preocupaba que no se lo quitara para el colegio».
«Al día siguiente me preguntó por qué el elfo le hizo eso, sino se había portado tan mal, pero le dije que es porque ayer se portó muy mal. Ahora le ha perdonado».
Leanne estuvo a punto de ser sorprendida en el acto cuando Iyla empezó a removerse mientras se garabateaba la cara alrededor de las 7.45 de la mañana, pero por suerte completó la hazaña antes de encender la luz para despertarla.
Antes de esforzarse por quitarse el lápiz de ojos con una toallita de bebé, Iyla no pudo resistirse a posar para un selfie con el elfo, en el que se la ve mirando enfadada por el objetivo.
Leanne afirma que los padres y los niños les han parado en el camino del colegio para decirles lo divertido que les ha parecido el vídeo, e incluso Iyla le ha preguntado a su madre si aparecerá en la televisión.
El post de la peluquera, titulado simplemente «la reacción más manchega» por el acento de Iyla, dejó a la gente conmocionada.
Un hombre comentó: «Esto es divertidísimo y adorable a la vez». Otro coincidió: «¡Es la reacción más bonita de la historia!».
Un tercero bromeó: «¿Cómo puede parecer que tiene siete y 47 años al mismo tiempo?».
Leanne, que vive con Iyla y su hijo Calum Ellis, de 15 años, dice que repetirá la broma el año que viene para ver si su hija reacciona de la misma manera.
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