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Los abuelos del menor podrían enfrentarse a cargos de negligencia infantil por no salvaguardar la vida del niño que fue atacado por el perro que le arrancó un brazo.
Un perro le arranca el brazo a un niño de cuatro años que sólo quería jugar
En la ciudad de Oklahoma, Tecumseh, un niño de cuatro años fue agredido por un pitbull que le arrancó un brazo.
El pequeño llamado Alex Foster, quiso entrar al lugar donde su abuela guardaba a los caninos; una perra -pitbull- tenía cachorros y el pequeño deseó jugar con ellos.
Por esto, metió su mano en la cerca, y al parecer, el canino se vio amenazado por lo que le arrancó el brazo.
Los abuelos avisaron a la policía que al llegar no lograron salvar la extremidad del menor. Y de inmediato fue trasladado al hospital.
Allí el personal trató de reconstruir su extremidad pero no lo logró.
«Podía ver el brazo dentro del corral y uno de los cachorros estaba tratando de morderlo», aseguró Aaron McCormick, uno de los oficiales, ante el medio Fox News.
Los agentes trataron de recuperar el brazo del niño pero al hacerlo se consternaron al ver que «la perra se volvió agresiva con ellos».
Recaudación de fondos
La madre de Alex, Destiny McDow, empezó a recaudar fondos para ayudar a la recuperación de su hijo.
Además, los abuelos del niño podrían enfrentarse a cargos por negligencia infantil.
Estadísticas de la negligencia infantil
Según el portal healthychildren.org: «Se reportan aproximadamente 3 millones de casos de abuso y negligencia infantil que implican a casi 5,5 millones de niños anualmente. La mayoría de los casos reportados a los Servicios de Protección al Menor son por negligencia, seguidos por abuso físico y sexual. Existe una superposición considerable entre los niños que son abusados y muchos que sufren una combinación de abuso físico, sexual o negligencia».
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