La historia de Diana Crouch, una superviviente de Covid de 28 años de Kingwood (Texas, EE.UU.) que, tras dar positivo en Covid en su 18ª semana de embarazada, sufrió tres derrames cerebrales y un ataque al corazón. Pero tras 139 días en el hospital pudo volver a casa: «Lo que ocurrió fue un milagro, incluso para mi bebé».
Ataque al corazón y tres derrames cerebrales después de Covid estando embarazada, el milagro de Diana
Pasó 139 días en el hospital luchando contra el Covid-19, que también le causó un infarto y tres derrames cerebrales, mientras estaba embarazada.
Pero los médicos consiguieron salvarla y ahora Diana Crouch, de 28 años, de Kingwood (Texas, EE.UU.), está casi completamente recuperada y puede volver a casa con su bebé.
Su pesadilla comenzó en agosto de 2021, cuando dio positivo en la prueba del Coronavirus.
Entre los primeros síntomas, sufrió dolores de cabeza. Su médico pensó que simplemente estaba deshidratada, pero su estado no mejoró. Cuando llegó a la sala de urgencias el 4 de agosto, se le hizo un hisopo y se confirmó que era positivo.
Dos días después, fue hospitalizada con neumonía.
Con dos hijos en casa y otro en camino, la joven madre fue trasladada al Texas Children’s Hospital. Con sólo 18 semanas de embarazo, fue conectada a un respirador y sedada el 10 de agosto.
Tras 20 días sin mejorar su estado, el Dr. Cameron Dezfulian decidió que la ECMO, la máquina cardiopulmonar, era el último recurso para Diana.
El objetivo, según explicó el médico a la familia, era llevar al bebé de 28 años a una fase avanzada del embarazo. Chris dejó claro que quería salvar tanto a su mujer como a su hijo no nacido. «Definitivamente fue lo más difícil que he tenido que hacer», subrayó el hombre. En la semana 25 de embarazo, Dezfulian dijo que Diana parecía estar mejor, pero las cosas empeoraron rápidamente: sufrió tres derrames cerebrales en un día y un ataque al corazón. También tuvo convulsiones, pero el equipo médico consiguió salvarla.
A las 31 semanas de embarazo, con fecha original de parto el 9 de enero, Diana fue sometida a una cesárea de urgencia tras sufrir un colapso pulmonar. Su estado mejoró tras el parto y, al cabo de diez días, se le retiró el respirador. Entonces fue trasladada al Hospital Metodista y evaluada para un posible trasplante de pulmón, pero finalmente se determinó que no lo necesitaba. El 23 de diciembre, la nueva madre recibió el alta tras 139 días.
Diana permaneció en cuidados intensivos durante semanas y tiene muy pocos recuerdos de su estancia en el hospital. «Da miedo. Estuve allí casi cinco meses. Parecía un año», dijo la joven de 28 años, que todavía necesita oxigenoterapia, y añadió: «Lo que ocurrió fue un milagro, incluso para mi bebé, al que llamamos Cameron, en honor al médico que nos salvó la vida».
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