Urgente: Se necesita ayuda para padres de bebé con hidrocefalia en Hermosillo

En el Hospital Infantil del Estado de Sonora (HIES), un bebé de apenas tres meses se encuentra en una lucha constante por su salud. Nacido prematuramente a las 28 semanas de gestación, ha sido diagnosticado con hidrocefalia, una condición que provoca acumulación de líquido en el cerebro.

Yorleni Beatriz Ríos Díaz, madre del pequeño y originaria de Nacozari, Sonora, ha estado a su lado desde su nacimiento. Con el corazón lleno de esperanza y angustia, ha sido testigo de cómo su hijo ha tenido que enfrentarse a múltiples intervenciones quirúrgicas en un corto periodo de tiempo.

El camino desafiante de un bebé prematuro

La historia de este niño refleja la lucha diaria que enfrentan muchas familias con bebés prematuros. Según Yorleni, desde su nacimiento, su hijo sufrió una hemorragia cerebral de grado cuatro, lo que llevó al diagnóstico de hidrocefalia. A tan solo un mes de vida, los médicos colocaron una válvula para drenar el exceso de líquido, pero su organismo ha tenido dificultades para aceptar este dispositivo.

“Han intentado colocarle hasta tres válvulas, pero se tapan”, relató Yorleni, visiblemente afectada por la situación. La semana pasada, el pequeño fue sometido a su cuarta operación, donde se le insertó un catéter en la cabeza para ayudar con el drenaje, una medida necesaria para evitar que su cabeza aumente de tamaño de manera peligrosa.

El impacto emocional y económico en la familia

La situación no solo ha sido difícil en el aspecto médico. La familia enfrenta una carga emocional y económica considerable. Yorleni y su esposo, de 23 años, han tenido que dejar su hogar y trasladarse a Hermosillo en busca de atención médica especializada para su hijo. “Mi esposo ha estado conmigo todo este tiempo, pero eso significa que no ha podido trabajar. Nos está costando mucho cubrir todos los gastos, incluyendo pañales y comida”, comentó.

Además, la pareja se encuentra en un albergue donde deben pagar una cuota. “Es complicado, porque estamos solos aquí. Mi esposo se va mañana y mi mamá vendrá a ayudarme, pero no podemos movernos de aquí, estoy en el tercer piso, cerca de la sala de cirugía”, añadió con tristeza.

Un llamado a la solidaridad

Ante esta difícil situación, Yorleni ha hecho un llamado a la comunidad para recibir apoyo en forma de donaciones de pañales, ya que su hijo usa una talla de recién nacido, que le queda mejor que la de prematuro. “Cualquier ayuda es bienvenida, no solo para los pañales, sino también para alimentos o incluso apoyo emocional”, expresó con la esperanza de que más personas se sumen a su causa.

Las familias que pasan por situaciones similares son un recordatorio de la importancia de la solidaridad comunitaria. Si deseas ayudar a Yorleni y su bebé, puedes contactarla directamente al número de celular 6621944584 o visitar el HIES para aportar en persona.

La historia de Yorleni y su hijo resalta la necesidad de un esfuerzo conjunto para ayudar a quienes enfrentan retos tan desafiantes. La comunidad tiene el poder de marcar la diferencia en la vida de esta familia en un momento crítico.