Una mujer muere a los 48 años tras luchar en vano contra una gravísima enfermedad. Intentó por todos los medios escapar de la muerte, pero desgraciadamente la enfermedad pudo con ella y dejó de respirar en las últimas horas, todo el mundo la recuerda con mucho cariño, porque era una persona extraordinaria, en particular, tenía una maravillosa relación con su hermana Bruna, que quiso recordarla con un largo y emotivo mensaje.
Una mujer muere a los 48 años, un mes después de casarse: deja una niña
Daniela Andreola murió un mes después de casarse con su querido marido Roberto, había conseguido realizar su gran sueño, pero desgraciadamente la alegría le duró muy poco.
Sentía un amor infinito por su hermana y había tenido una niña, a la que describió como «su obra más bella», según informa la página web de «La Nazione«. Trabajaba como limpiadora y su madre, Inés, y su padre, Francesco, también acabaron sumidos en la más profunda tristeza.
La mujer era originaria de Pistoia, su hermana Bruna era una jugadora de voleibol muy conocida, de hecho, ha vestido las camisetas de Sperone, San Marcello Pistoiese y hasta hace un par de años jugaba en el Appennino Pistoiese Volley de San Marcello.
De hecho, la hermana de la infortunada Daniela quiso expresar así su último adiós.
El mensaje de su hermana a Daniela Andreola dice: «Querida Daniela, siempre has sido una chica sencilla y alegre, creciste, te convertiste en mujer y luego en madre de una hermosa niña, eras feliz con ella: era tu fuerza, tu vida, el 22 de enero de este año realizaste tu sueño: te casaste con Roberto, el padre del bebé, y el 20 de marzo fue el día elegido para celebrar la boda.
Desgraciadamente, ese maldito mal que había arraigado en tu cuerpo se apoderó poco a poco de ti, alejándote finalmente de todos nosotros».
Y finalmente añadió: «Por eso, todos queremos decirte, con fuerza, que has sido una buena esposa, una buena madre, una buena tía, una buena hermana y una buena cuñada. Todos te queremos: nunca te olvidaremos». El funeral de la mujer tendrá lugar en la iglesia de Santomato, donde todos se reunirán para dar el último adiós a Daniela.
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