Una mujer, de 26 años, muere de cáncer de mama tras confundir un bulto con un conducto lácteo obstruido

Sophie Collins, de Maidstone (Kent), acudió a su médico de cabecera tras encontrar un bulto en el pecho, pero su médico la despidió diciendo que debía tratarse de un conducto lácteo obstruido relacionado con su embarazo.

Una mujer, de 26 años, muere de cáncer de mama tras confundir un bulto con un conducto lácteo obstruido

Una joven madre ha muerto de cáncer de mama después de que el bulto que mostró a los médicos fuera descartado como un conducto lácteo obstruido.

Sophie Collins, de Maidstone (Kent), tenía sólo 26 años cuando murió en enero de una forma agresiva de cáncer de mama que se extendió por todo su cuerpo.

La madre soltera fue diagnosticada 13 meses antes mientras estaba embarazada de 10 semanas de su segundo hijo.

En los últimos meses de su vida, Sophie trató de concienciar y empujar a las mujeres jóvenes a considerar la posibilidad de que el cáncer de mama les afecte a ellas también.

Y ahora, su hermano Matthew, que está de duelo, cuenta su historia con la esperanza de que su legado salve a otras personas de un destino similar.

Matthew declaró a The Sun: «Sophie era una persona maravillosa. Alegre, amable y valiente. Era muy divertida y podía hacerme llorar de risa.

«Al crecer, siempre fuimos inseparables. Pero después de que nuestro padre muriera de cáncer de linfoma, cuando yo tenía 14 años y ella 10, esa experiencia compartida de perder a un padre a una edad temprana, nos unió aún más.»

Sophie se dio cuenta por primera vez de que algo no iba bien tras encontrar un bulto en su pecho izquierdo al salir del baño.

Después de hablarlo con su familia, fue a ver al médico de cabecera, quien «descartó el bulto como si fuera simplemente un conducto lácteo obstruido» porque estaba embarazada de su segunda hija.

El médico la despidió «aconsejándole que se diera un masaje con agua caliente», explica Matthew.

Pero el tratamiento no sirvió de nada y, como el bulto seguía creciendo, Sophie insistió en obtener una segunda opinión de un especialista en mamas.

En esta cita se le diagnosticó un cáncer de mama triple negativo en fase 3, que suele considerarse la forma más agresiva de la enfermedad.

El cáncer se extendió

En enero de 2021 le extirparon la mama izquierda, pero las biopsias realizadas tras la operación revelaron que el cáncer se había extendido a los ganglios linfáticos cercanos.

En marzo de ese año, y a medida que se acercaba el momento de dar a luz a su segundo hijo, comenzó la quimioterapia.

Después de dar a luz a Delilah el 14 de abril, un escáner mostró que el cáncer se había extendido aún más, con tumores encontrados en su clavícula, dijo Matthew.

Fue entonces cuando los médicos comunicaron a Sophie que su cáncer era incurable y terminal.

Sophie, que trabajaba en el servicio de limpieza y en un Travelodge, publicó actualizaciones sobre su trayectoria en las redes sociales, al principio como una forma de mantener a sus seres queridos al tanto de su evolución.

No pasó mucho tiempo antes de que otras jóvenes se pusieran en contacto con ella para pedirle consejo después de encontrar sus propios bultos.

La joven madre sacó fuerzas de sus dos hijas, Daisy y Delilah

«Lo único que quería era pasar más tiempo con sus bebés. Sabía lo que quería y no estaba dispuesta a conformarse», dijo a The Sun.

Sophie se sometió a duras sesiones de quimioterapia con la esperanza de que la enfermedad se ralentizara.

Pero el cáncer se extendió con fuerza por todo su cuerpo y se le pegó a la columna vertebral, las caderas, la espalda y el pecho.

Tres semanas después de terminar la quimioterapia en septiembre, los médicos le dieron la devastadora noticia de que el tratamiento no había funcionado.

Daisy, que ahora tiene tres años, y su hermanita Delilah, de ocho meses, viven con sus padres por separado.

Hablando de la trágica pérdida de las niñas, Matthew dijo: «Se nos rompe el corazón por las niñas de Sophie. Les han robado una mamá que haría cualquier cosa por ellas. Pero deberían estar muy orgullosas de ella.

«Desde que Sophie murió, mucha gente nos ha enviado mensajes para decir que seguían sus publicaciones, comentando lo encantadora y valiente que era. Una verdadera luchadora. Y Dios mío, luchó hasta su último aliento. Somos una familia muy unida. El fallecimiento de Sophie deja un gran vacío en nuestros corazones. Pero estamos muy orgullosos de la maravillosa mujer que era».

«A pesar de que su tiempo y energía eran limitados y muy valiosos, lo dedicó a apoyar y aconsejar a otras mujeres jóvenes. Eso lo dice todo sobre ella», agregó.