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La joven de 21 años está embarazada de 32 semanas y tiene un útero inclinado que parece pequeño.
Una mujer de 21 años con una diminuta barriga de 32 semanas de embarazo responde a los trolls que afirman que debe estar pasando hambre
Brooke Barclay, de 21 años y originaria de Edimburgo, se alegró mucho al descubrir que ella y su pareja Liam, de 22 años, estaban embarazados de su segundo hijo, después de haber tenido a Leighton, de tres años, en 2018.
Pero a medida que la joven madre avanzaba en su embarazo, se dio cuenta de que su vientre no estaba creciendo mucho y en su escáner de género de 16 semanas, su barriga seguía completamente plana.
Y ahora, a las 32 semanas –con un bebé que nacerá en febrero de 2022-, la barriga de Brooke no es ni mucho menos tan grande como se suele esperar en ese momento del embarazo, debido a su útero inclinado.
Brooke, que trabajaba como operaria de pruebas de COVID-19 antes de su permiso de maternidad, dijo: «Nos alegramos mucho al descubrir que estábamos embarazados de nuevo. Llevábamos un par de meses planificando e intentándolo». Agrego, «A pesar de los nervios por tener dos hijos, estamos impacientes por conocer a nuestro nuevo hijo».
Un embarazo saludable
«Hasta ahora, el embarazo ha sido saludable pero difícil, con constantes náuseas matutinas durante todo el tiempo, mucho dolor de espalda y acidez estomacal», dijo la mujer.
Conitnuó: «Empecé a notar que mi barriga no se notaba tan rápido cuando nadie en el trabajo creía que estaba embarazada».
Además añadió: «Cuando llegó mi escáner de género, a las 16 semanas, todavía estaba completamente desanimada. No me preocupé realmente porque yo también era pequeña en mi primer embarazo y él pesaba más de 2,5 kilos». Comentó: «Entiendo que soy alta, así que tengo el torso más largo para que haya más espacio para el bebé«.
Brooke explicó que la razón por la que tiene una barriga más pequeña que otras mujeres embarazadas se debe a su útero inclinado.
Tiene útero inclinado
Un útero inclinado significa que la matriz se inclina hacia atrás en el cuello del útero en lugar de hacia delante, por lo que el bebé de una mujer embarazada se sentará hacia atrás en lugar de hacia delante.
«Lo descubrí durante mi último embarazo y no afecta en absoluto al bebé», dijo. «Es normal y común, y algunas mujeres ni siquiera saben que están embarazadas hasta el parto».
Después de compartir imágenes de su barriga en las redes sociales, Brooke dijo que recibió comentarios crueles por parte de trolls que decían que debía estar «pasando hambre».
Otros incluso dijeron que debía estar «mintiendo» sobre su embarazo para llamar la atención.
La gente le decía a Brooke, que aparece en la foto con 32 semanas de embarazo, que estaba mintiendo o que se estaba muriendo de hambre, e incluso que llevaba una faja para la cintura, y la trolleaban con comentarios diciendo que iba a tener un bebé pequeño.
Útero inlcinado: qué es
Cuando una mujer no está embarazada, el útero mide aproximadamente sólo 4 cm y durante el embarazo crece entre 500 y 1.000 veces su tamaño original. El útero tiene forma de pera y el extremo inferior es el cuello uterino.
¿Cuál es la causa de un útero inclinado?
No hay una sola causa para la inclinación del útero, pero a veces el embarazo puede crear una inclinación al estirar la zona circundante, incluido el ligamento que lo sostiene. Otras pueden nacer con él inclinado.
La endometriosis, los fibromas y la enfermedad inflamatoria pélvica pueden causar cicatrices que cambian la forma y la situación del útero.
Ahora Brooke comparte su historia con la esperanza de concienciar sobre la realidad de tener un útero inclinado y mostrar que no todos los vientres de las embarazadas tienen el mismo aspecto.
Y añadió: «Así que decidí publicar un TikTok con 20 semanas de embarazo, sin esperar que lo vieran más que mis amigos y mi familia».
Pero al cabo de un par de semanas, las visualizaciones empezaron a subir y los comentarios me inundaron. En total tuvo 3,4 millones de visitas.
«Había mucha gente que pensaba que conocía mi cuerpo más que yo y me decía que iba a tener un bebé pequeño», comentó. «Estos comentarios no me molestaban, porque sabía que mi bebé crecía bien y estaba sano».
Continuó: «La gente asume automáticamente que tener un bulto pequeño significa que hay algo malo en mí o en el bebé, pero no es así en absoluto. Me gustaría que la gente no juzgara de inmediato. El cuerpo de cada persona es diferente, y eso no significa que no esté sana o que me esté alimentando mal a mí y al bebé«.
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