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Un influencer colombiano se pone implantes de pecho sólo por diversión

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El influencer colombiano Yeferson Cossio, se ha puesto unos implantes mamarios de silicona por diversión tras una apuesta.

Un influencer se pone implantes por diversión

El joven de 26 años Yeferson Cossio, que tiene 3,4 millones de seguidores en Instagram, apostó con su cuñado, Jhoan López, que llegaría a los tres millones de seguidores en la red social y, si no lo conseguía, se pondría los implantes.

«¿Te imaginas llegar a viejo y decir que una vez perdí una apuesta y me puse unas tetas enormes?», dijo.

Ganó el reto en menos de un mes, pero decidió también lanzarse a la pena junto con su cuñado.

«No estoy preocupado, ya hablé con los médicos y me explicaron que no dañará mis músculos pectorales», dijo. «Me dejaré los implantes tres días y luego me los quitaré, la cicatriz será pequeña y bajo un tatuaje, por lo que no se notaría en absoluto», explicó antes de saber que había ganado.

La operación de Cossio

Poco menos de un mes después de anunciar el reto, anunció que se había sometido a la operación y que mostraría los resultados. Lo hizo con un vídeo bastante explícito de la operación.

Más tarde publicó otro post mostrando sus nuevos pechos, diciendo que lo había hecho por diversión y que se los quitaría en una semana.

Mientras grababa las reacciones de sus familiares, su novia le dijo en broma «no es normal que tu marido y tu hermano se pongan tetas».

Las críticas por el reto

Tras las críticas recibidas por su decisión, expresó su respeto por las mujeres que tienen que someterse a operaciones de pecho, de las que dijo que eran «lo más doloroso que he hecho en mi vida».

También se disculpó con los «miles de transexuales que ahorran toda su vida para tener tetas y no tienen suficientes y luego llega un hijo de puta como yo y se las pone». Y añadió: «Pido perdón por tener dinero».

A pesar de las disculpas, hizo un punto válido al decir que cuando era niño, su familia era pobre, pero nunca se quejó de que otros niños recibieran regalos cuando él no lo hacía porque no consideraba que fuera su culpa. «Así es la vida», dijo, «¿no te da pena descargar tu frustración conmigo en las redes sociales?».

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