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Atrapada en un ataque completamente no provocado, una joven fue asaltada por un grupo de entre cuatro y seis mujeres que le robaron su dinero y su teléfono. Pero lo más valioso que le arrebataron aquella noche fue su bebé aún no nacido. Al parecer, una de la mujeres le dio una patada y esta le provocó el aborto por lo que perdió a su bebé.
En medio de un robo, adolescente perdió a su bebé
El 11 de julio, Beth Newman estaba viendo la final de la Eurocopa en un pub con su tía y una amiga. Alrededor de las 11 de la noche, salieron del pub, y fue entonces cuando se produjo una refriega con las otras chicas.
«No recuerdo toda esa noche. Sólo recuerdo que al día siguiente estaba en el hospital y me dolía mucho», dijo Beth a KentOnline. «No podía mover el cuello, no podía caminar bien. Estaba cubierta de moratones de la cabeza a los pies, por todas partes. Fue bastante horrible». Al recordar el breve encuentro que tuvo lugar antes de la agresión, Beth dijo: «Pasé por delante de la primera chica y volvía hacia el pub para coger a mis amigos, y ella me miró de arriba abajo. La miré de nuevo, y me dijo: «¿Qué estás mirando?». Le dije tranquilamente ‘¿cuál es tu problema?'».
La agresión a la joven
Beth empezó a alejarse, pero «se acercó por detrás, me agarró la trenza y me dio un puñetazo en la cabeza».
«Intenté defenderme, pero antes de darme cuenta había un montón de ellos encima de mí», dijo la joven, que estaba en las primeras etapas de su embarazo. «Me dieron patadas en la cabeza y me pisotearon, y me dieron una patada en el estómago, que luego me provocó un aborto».
Justo en el lugar de los hechos, Beth empezó a sufrir un ataque. La visión de sus convulsiones fue lo que se encontró su madre cuando llegó al lugar, cerca del pub Quart In A Pint de Margate (Kent).
La patada le hizo perder al bebé
«Me pareció que tardaba horas en llegar y cuando doblé la esquina para verla convulsionando de verdad, fue un shock tan grande», dijo su madre, Kat Hazelton. «Fue algo muy traumático para ella y para los testigos. Nunca había estado tan asustada». Beth tuvo que pasar cuatro días en el hospital QEQM y fue tratada de una lesión en la cabeza antes de que se le permitiera volver a casa. Dos días después de recibir el alta, la joven se encontró sangrando y se dio cuenta de que por la patada había perdido a su bebé a causa del atroz ataque.
Lo que le duele es la idea de no saber quiénes son sus agresores y no tiene ni idea de por qué la hicieron pasar por semejante calvario. «Tengo miedo de salir de casa«, dijo. «No quiero que pase algo más como la agresión y no quiero estar sola porque me puede dar un ataque». Se creó una página de JustGiving para recaudar fondos para Beth, que aún se está recuperando y está a la espera de saber el motivo de sus continuos ataques.
«Nadie merece que se le haga pasar o se le haga sentir así independientemente de cualquier situación», decía la página de recaudación de fondos, instando a la gente a ayudar con donaciones porque Beth «merece volver a tener esa hermosa sonrisa en su cara».
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