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Stephen Parsonage, padre de cuatro hijos, se prendió fuego después de usar una lata entera de laca para el pelo antes de una noche de fiesta y encender un cigarrillo.
Un hombre se prende fuego luego de usar laca en su cabello
El mecánico de 26 años, de Blackburn (Lancashire), sufrió quemaduras de segundo grado en la cara después de que su corto cabello castaño se viera envuelto en llamas de medio metro de altura.
Acababa de dar los últimos toques a su corto peinado cuando su encendedor prendió la niebla dejada por el spray Insette.
El Sr. Parsonage consiguió apagar el fuego con sus manos, lo que le causó quemaduras de primer grado, antes de que los bomberos y los paramédicos llegaran al lugar. Fue trasladado al hospital y espera que su cara no quede marcada para siempre.
El mecánico ha declarado hoy: «Fue el momento más aterrador de mi vida»
«Todo sucedió muy rápido y las llamas podrían haberse extendido fácilmente al resto de mi cuerpo. No he podido peinarme desde lo ocurrido y me da vergüenza salir y que la gente me vea.
Espero que no me queden cicatrices de por vida. Tendré que replantearme cómo peinarme en el futuro. Puede que tenga que volver a usar gel», dijo.
El incidente ocurrió el domingo por la noche, cuando el Sr. Parsonage se preparaba para salir con sus amigos.
Y añadió: «Estoy un poco obsesionado con mi pelo y me gusta que esté bien. Me lo peino al menos dos veces al día y siempre me ajusto el flequillo para que esté perfecto. No me gusta que parezca seco, así que busco el ‘look húmedo’ utilizando laca».
Y continuó: «No puedo utilizar gomina porque soy alérgico a ella, ya que tengo una enfermedad de la piel y la gomina me produce costras en la cabeza. Me estaba peinando en la cocina, como hago siempre. Me eché un poco de agua antes de coger la laca y me eché un chorro rápido en el flequillo. Unos minutos más tarde, y sin pensar realmente, me encendí… Los vapores de la laca debieron encenderse cuando prendí el mechero».
«El calor era intenso y podía oler cómo se quemaba mi piel y oír cómo se chamuscaba mi pelo. Me entró el pánico y empecé a correr y a darme palmaditas en la cabeza, pero las llamas se habían extendido a la parte posterior de la cabeza. Era realmente doloroso. Mi cabeza estaba envuelta en llamas y pensé que iba a morir», dijo.
«El olor a carne quemada era intenso. También tenía las manos rojas porque estaba apagando las llamas con las manos desnudas y se me había quemado un lado del pelo«, agregó.
«Después de unos tres minutos… Conseguí apagar las llamas, o creí que lo había hecho, pero entonces se reavivaron en la parte posterior de mi cabeza y corrí al fregadero y puse la cabeza bajo el grifo. Mi novia me dijo que no mirara mis heridas en el espejo, pero me miré y me quedé horrorizado. Toda la piel de mi frente se estaba desprendiendo y comenzaba a desprenderse. Era horrible y me hacía sentir mal. La piel estaba amarilla y con ampollas», indicó.
La angustia de su novia
La novia del Sr. Pasonage, Nicola, de 21 años, dijo: «Estaba muy asustada. Las llamas estaban a medio metro por encima de su cabeza. Me di cuenta de que tenía pánico».
Los bomberos están emitiendo una advertencia sobre el riesgo de exponer los gases inflamables como la laca para el cabello y el desodorante a las llamas.
El jefe de guardia de Blackburn, Steve Johnson, dijo: «Este es un mensaje de seguridad contra incendios realmente importante. Este muchacho se había echado laca en el pelo y luego encendió un cigarrillo sin pensar en las consecuencias. Tuvo suerte de escapar.
«Su mechero encendió una bola de gas que prendió fuego a la laca que tenía en la cabeza. Los aerosoles no deben utilizarse en un espacio cerrado», concluyó.
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