Ella Genve Shaw, es la adolescente de 19 años, que vive en una isla remota frente a la costa oeste de Canadá y dice que creció en una pequeña comunidad de unas 15 familias donde no hay tiendas, internet o electricidad.
La adolescente viaja 3 horas para ir de compras
La adolescente tiene que viajar tres horas para ver a sus amigos e ir de compras; sin embargo, le agrada el hecho de ser un joven que vive en una isla remota sin ningún tipo de privilegio como internet o electricidad.
Ella Genve Shaw, es la adolescente que vive en una isla remota frente a la costa oeste de Canadá, y, Campbell River es la ciudad más cercana y está a tres horas en bote.
Creció en la isla con sus padres y su hermana menor, Arwen, de cinco años, Ella, pasó su adolescencia buscando comida, construyendo muebles y teniendo un contacto limitado con el mundo exterior.
La isla, que Ella Genve no quiere nombrar, no tiene electricidad, WiFi, tiendas ni cobertura telefónica, por lo que tiene que viajar a la ciudad vecina para reunirse con amigos e ir de compras. Para esto, la familia usa un bote para viajar.
Y, lo hace con frecuencia ya que su madre, Heather, de 51 años, trabaja en una isla vecina.
La adolescente vive en la isla remota por tradición
Ella, es una recién graduada de la escuela secundaria, que ante su situación dice: «mi madre creció en la isla, por lo que siempre ha sido mi hogar.
Es una comunidad muy unida».
Así mismo, recalca «tenemos nuestro propio barco para viajar entre las islas y, para ir a la ciudad más cercana; tenemos que tomar nuestro barco y luego un ferry».
A su vez, la joven asegura que «nos puede llevar hasta tres horas llegar y, con mal tiempo, no podemos viajar a ninguna parte. Durante el invierno, podemos estar atrapados en la isla durante dos meses, por lo que tenemos que asegurarnos de tener suficientes suministros».
También, destaca que «toda la comida que comemos se cultiva en la isla. Y, tenemos pollos, patos y otros animales que se crían para la alimentación». A menudo se ve obligada a viajar a la ciudad para abastecerse, incluidos alimentos básicos y ropa.