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La caída de una marca icónica
Tropicana, la marca de jugo de naranja más reconocida en Estados Unidos, está atravesando una crisis financiera que podría llevarla al borde de la quiebra. Fundada en 1947, Tropicana se ha convertido en un símbolo en muchas casas, no solo en América, sino en todo el mundo.
Sin embargo, la situación actual de la compañía es alarmante. Según informes recientes, Tropicana Brands Group, que también posee Naked y KeVita, ha visto una caída del 10% en sus ingresos, lo que ha llevado a sus propietarios a buscar préstamos de emergencia para mantenerse a flote.
Factores climáticos y cambios en el mercado
Uno de los factores que ha contribuido a esta crisis es el impacto del cambio climático. Florida, el estado donde se cultivan la mayoría de las naranjas para Tropicana, ha sido golpeado por huracanes devastadores, como el huracán Milton en 2024, que afectó gravemente la producción de cítricos.
Matt Joyner, director ejecutivo de Florida Citrus Mutual, indicó que el huracán tuvo un impacto en el 70% de la superficie cultivada de cítricos en el estado. Además, las plagas de insectos han causado que muchas naranjas se pudran en los árboles, lo que agrava aún más la situación.
Un cambio en los hábitos de consumo
Otro aspecto crucial que está afectando a Tropicana es el cambio en los hábitos de consumo. Los consumidores están cada vez más interesados en opciones más saludables y menos azucaradas, lo que ha llevado a una disminución en la demanda de jugo de naranja.
En lugar de optar por este tradicional jugo, muchos están eligiendo bebidas como té, agua con gas y bebidas energéticas. Según una encuesta de Mintel, solo el 19% de los consumidores estadounidenses considera que el jugo de naranja tiene una buena relación calidad-precio, lo que refleja un cambio significativo en la percepción del producto.
El futuro incierto de Tropicana
La producción de naranjas en Estados Unidos está en su nivel más bajo en 88 años, lo que plantea serias dudas sobre el futuro de Tropicana. Alico, uno de los principales proveedores de la marca, ha cesado sus operaciones de cultivo de cítricos, citando la falta de viabilidad económica. A pesar de la baja demanda, los precios del jugo de naranja han aumentado drásticamente debido a problemas de suministro, alcanzando máximos históricos a finales de 2024. Esto crea una paradoja en la que, a pesar de que los consumidores compran menos jugo, los precios se disparan.
El impacto en el comercio minorista
La crisis de Tropicana también refleja una tendencia más amplia en el comercio minorista. Muchas cadenas han reducido su número de tiendas debido a cambios en los hábitos de consumo y a desafíos económicos. La preferencia por las compras en línea ha afectado significativamente a los minoristas tradicionales, obligándolos a adaptarse para sobrevivir. Expertos advierten que la debacle de las tiendas físicas continuará en los próximos años, y aquellas que logren sobrevivir deberán invertir en experiencias personalizadas y servicios exclusivos para atraer a los consumidores.