El pasado miércoles, un total de 127 nuevos diputados juraron en el Congreso de Argentina, marcando el inicio de una nueva era política bajo la presidencia de Javier Milei. Este evento se celebró en un contexto de tensión y cambios significativos, ya que el partido La Libertad Avanza se posiciona como la principal fuerza opositora con 95 escaños de un total de 257. La reelección de Martín Menem como presidente de la Cámara baja fue respaldada por una amplia mayoría, aunque se hizo notar la abstención de la oposición kirchnerista y de la izquierda.
Un hecho notable fue la ausencia de la senadora electa Lorena Villaverde, quien decidió no asumir su cargo en el Senado por razones familiares. Esta decisión surge en medio de acusaciones sobre sus vínculos con el empresario Federico ‘Fred’ Machado, extraditado por cargos de narcotráfico. La controversia en torno a Villaverde llevó a que Enzo Fullone asumiera su lugar como nuevo senador por la provincia de Río Negro, aunque aún queda por ver si Villaverde también renunciará a su escaño como diputada nacional.
Cambios en la inteligencia y el gabinete
En una serie de despidos que marcaron el inicio de la administración de Milei, el director de la Agencia Federal de Inteligencia SIDE, Sergio Neiffert, fue reemplazado por Cristian Auguadra. Este cambio se interpreta como un reflejo de la disminución de la influencia de Neiffert, quien fue un pilar en la organización inicial de la agencia. Según el comunicado oficial, Neiffert fue crucial en una fase inicial de reestructuración, pero ahora se ha llegado a un punto donde la SIDE necesita avanzar hacia una modernización técnica.
El mismo día, el nuevo Jefe de Gabinete, Manuel Adorni, decidió despedir al vicejefe de gabinete, José Rolandi, quien había estado en el cargo durante las gestiones de sus predecesores. Su reemplazo, Aimé ‘Meme’ Vázquez, llega con una trayectoria en la política de la ciudad de Buenos Aires. Además, se anticipan más cambios, como la salida del subsecretario de Derechos Humanos Alberto Baños, en medio de un clima de incertidumbre en el gabinete.
La nueva ministra de Seguridad y sus prioridades
La transición en el Ministerio de Seguridad también captó la atención del público. Alejandro Monteoliva fue nombrada como la nueva ministra tras la renuncia de Patricia Bullrich. En su primer discurso, Monteoliva subrayó la importancia de continuar con la doctrina Bullrich, que enfatiza la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico. La nueva ministra se comprometió a mantener el enfoque en la seguridad en las calles de Buenos Aires y a priorizar la liberación de un guardia de fronteras detenido en Venezuela.
La ceremonia de asunción estuvo marcada por la presencia de figuras clave del gobierno, incluyendo a Milei y a Bullrich. La nueva ministra destacó que no puede haber desarrollo sin seguridad y que el orden es esencial para garantizar la libertad.
Controversias y desafíos en el Senado
El 28 de noviembre, 23 de los 24 senadores electos también prestaron juramento, subrayando la dinámica política en curso. La controversia en torno a Villaverde resuena en el Senado, donde su partido decidió devolver sus credenciales a la comisión. La vicepresidenta Victoria Villarruel tuvo que lidiar con fricciones en la ceremonia, oponiéndose a la presencia de miembros del Ejecutivo, lo que generó un ambiente tenso entre las distintas facciones políticas.
Estos cambios en el Congreso y el gabinete reflejan un periodo de transformaciones significativas en la política argentina. A medida que el gobierno de Milei se establece, las decisiones tomadas y las controversias que surgen tendrán un impacto duradero en la dirección del país.



