Simulacro de Terremoto en la Universidad de El Salvador: Claves para una Preparación Efectiva

El 21 de octubre fue un día significativo para la comunidad de la Universidad de El Salvador, que participó en el simulacro nacional de terremoto organizado por la Dirección de Protección Civil. Esta actividad, coordinada por el Comité Central de Seguridad Ocupacional y los comités de cada facultad, buscaba concienciar a estudiantes y personal sobre la importancia de estar preparados ante emergencias.

El rector de la universidad, Maestro Juan Rosa Quintanilla, enfatizó que la prevención es esencial en un país propenso a sismos como El Salvador. Durante su discurso, subrayó que la comunidad universitaria debe abordar el simulacro con seriedad y responsabilidad, destacando que la seguridad de cada individuo es la prioridad en cualquier eventualidad.

La relevancia de los simulacros en la educación superior

La participación activa en simulacros como este no solo permite a los estudiantes practicar sus habilidades de evacuación, sino que también refuerza la cultura de la prevención. La vicerrectora académica, Dra. Evelyn Farfán, destacó la importancia de saber cómo actuar durante un evento real. “La evacuación ordenada es crucial para evitar lesiones. Si no sabemos cómo proceder, podríamos agravar la situación,” indicó Farfán, resaltando la necesidad de un aprendizaje práctico.

Desarrollo de ejercicios de evacuación

Durante el simulacro, que comenzó a las 10:00 a.m., se activó la alarma antisísmica, lo que llevó a la comunidad a evacuar de manera organizada. Todos los participantes siguieron los protocolos establecidos, lo que permitió que la actividad se desarrollara sin inconvenientes. Los comités de seguridad ocupacional, junto con las autoridades universitarias, supervisaron el ejercicio para garantizar su efectividad.

Evaluación y seguimiento del simulacro

Una vez concluido el simulacro, se realizó una evaluación por parte de los representantes de Protección Civil y los comités de seguridad de la universidad. Lcda. Delma Lily García, presidenta del Comité de Seguridad y Salud Ocupacional, informó que en esta actividad participaron ocho facultades del campus central y varias oficinas centrales. Se planea realizar un segundo simulacro el 23 de octubre para incluir a más unidades.

Este simulacro no solo promueve la práctica de evacuación, sino que también impacta positivamente en la cultura de seguridad de la universidad. Con cada ejercicio, se busca mejorar la capacidad de reacción ante emergencias, asegurando que todos sepan cómo actuar en caso de un evento real.

Compromiso de la comunidad universitaria

La respuesta positiva de estudiantes y personal durante el simulacro indica el compromiso que la universidad tiene con la seguridad. La participación activa en estos ejercicios refuerza la idea de que cada miembro de la comunidad juega un papel vital en la gestión de riesgos y la seguridad. “Es fundamental que cada uno de nosotros esté preparado para protegerse y ayudar a los demás,” comentó el rector Quintanilla.

La realización de este simulacro nacional de terremoto no es solo una formalidad; es un paso hacia la creación de una cultura de prevención y seguridad que puede marcar la diferencia en situaciones de crisis. La preparación es clave, y en un país con altos riesgos sísmicos, la educación y la práctica son herramientas imprescindibles para salvar vidas.