Durante su conferencia de prensa habitual el pasado lunes, la presidenta Claudia Sheinbaum abordó las devastadoras inundaciones que azotan varios estados de México. Con un alarmante número de 76 fallecidos y 27 personas reportadas como desaparecidas, la situación es crítica en zonas afectadas como Veracruz, Hidalgo, Puebla y Querétaro. La crisis actual ha acaparado la atención de los medios y del público, eclipsando otros asuntos políticos urgentes.
Al dirigirse a la nación, Sheinbaum también se refirió a los recientes acontecimientos en el ámbito político. Los reporteros le preguntaron su opinión sobre el Partido Acción Nacional (PAN), que había anunciado un importante esfuerzo de rebranding tras la disolución de su alianza con el Partido Revolucionario Institucional (PRI). La curiosidad giraba en torno a si tal transformación podría lograrse solo con estrategias de marketing.
Crítica al momento del PAN
En su respuesta, Sheinbaum no abordó directamente la pregunta del periodista, pero sí expresó su desaprobación por la decisión del PAN de relanzarse en medio de una crisis. “El momento de su anuncio muestra una falta de sensibilidad”, comentó, subrayando que muchas familias sufren a causa de las inundaciones. “¿No podrían haber pospuesto esto unas semanas hasta que se manejara la emergencia?”
Continuó criticando al PAN por su aparente insensibilidad, afirmando que las acciones del partido en un tiempo tan trágico reflejan una desconexión fundamental con la ciudadanía. El nuevo logo y eslogan del partido, que enfatiza “Patria, Familia, Libertad”, fueron presentados en Ciudad de México, lo que Sheinbaum calificó como una decisión errónea y carente de genuino interés por los ciudadanos.
Continuidad dentro del PAN
Sheinbaum también destacó que las personas detrás del rebranding del PAN permanecen sin cambios, sugiriendo que el partido no se ha transformado realmente a pesar de su nueva imagen. Actualmente, el PAN se sitúa como la principal oposición en la Cámara de Diputados y el Senado, donde predominan el partido Morena y sus aliados.
El PAN gobernó a nivel federal durante la presidencia de Felipe Calderón de 2006 a 2012, y al igual que su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, Sheinbaum ha criticado abiertamente a Calderón, atribuyendo muchos de los problemas actuales del país, especialmente el aumento de la violencia, a su administración.
Reflexiones sobre las elecciones en Bolivia
Al cambiar de tema, un reportero preguntó sobre las recientes elecciones presidenciales en Bolivia, donde un candidato centrista emergió victorioso, marcando un cambio significativo respecto al liderazgo de izquierda. Rodrigo Paz Pereira ganó en la segunda vuelta contra el ex presidente Jorge Quiroga, lo que llevó a Sheinbaum a comentar sobre las implicaciones más amplias para los movimientos progresistas en América Latina.
Expresó su decepción por la división entre los candidatos de izquierda en Bolivia, señalando que esto debilitó su fuerza colectiva. “Es lamentable presenciar tales divisiones, especialmente cuando la unidad es crucial para nuestro movimiento”, afirmó, refiriéndose a la iniciativa de la “Cuarta Transformación” liderada por su partido, Morena.
La importancia de la unidad en los movimientos políticos
Sheinbaum enfatizó que mantener un frente cohesionado es vital para el éxito de los movimientos políticos. “Cuando las facciones se fragmentan, se diluye nuestra fuerza y se socava nuestra conexión con el pueblo”, agregó, reflejando los desafíos que enfrentan los grupos progresistas que pueden llevar a pérdidas electorales.
A pesar de algunos murmullos de división dentro de Morena, el partido sigue disfrutando de una notable popularidad, con Sheinbaum manteniendo una fuerte aprobación pública. Una reciente encuesta de El Financiero reveló que terminó su primer año en el cargo con un elogiable 73% de aprobación, ilustrando su liderazgo efectivo durante tiempos turbulentos.