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La realidad de la moda deportiva
En la actualidad, muchas de nuestras prendas deportivas favoritas están hechas de materiales sintéticos, como el nylon y el poliéster, que provienen de combustibles fósiles. Estos materiales no son precisamente los más amigables con el medio ambiente.
Por otro lado, las fibras naturales, aunque más sostenibles en teoría, también presentan desafíos. Por ejemplo, el cultivo de algodón consume grandes cantidades de agua y pesticidas, mientras que la producción de lana genera emisiones de metano. La industria de la moda, incluyendo el calzado, representa más del 8% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero.
Entonces, ¿cómo podemos mantenernos activos y cuidar del planeta al mismo tiempo?
La solución de las fibras recicladas
Una alternativa prometedora es optar por fibras recicladas. Con la creciente cantidad de plástico que contamina nuestros océanos y tierras, algunas marcas han comenzado a transformar residuos plásticos en hilos para confeccionar ropa.
Karen Leonas, profesora de ciencias textiles, destaca que las prendas que contienen fibras recicladas son una opción positiva desde el punto de vista ambiental. Sin embargo, Lewis Perkins, presidente del Instituto de Impacto del Vestuario, advierte que estas soluciones son temporales y que el verdadero objetivo debe ser reducir el uso de plásticos desechables.
Evaluando los materiales
La elección de materiales no es sencilla. Leonas menciona que tanto el poliéster como el algodón tienen sus pros y contras. Aunque el poliéster proviene del petróleo, su producción requiere menos agua y no utiliza pesticidas. Por otro lado, la producción de lana y bambú plantea preocupaciones sobre el bienestar animal y la contaminación.
En lugar de buscar el tejido perfecto, Perkins sugiere enfocarse en encontrar la versión más ética de los materiales que satisfagan nuestras necesidades. Certificaciones como Oeko-Tex y Global Recycled Standard pueden ser indicadores de que un tejido ha sido verificado como sostenible.
Marcas y sostenibilidad
Al elegir ropa deportiva, es fundamental optar por marcas que demuestren un compromiso genuino con la sostenibilidad. Verificar si una empresa es certificada como B Corp puede ser un buen indicador de sus estándares sociales y ambientales. Además, es recomendable revisar las iniciativas de sostenibilidad de la marca y si ofrecen programas de reparación o reciclaje. Comprar ropa de segunda mano también es una excelente opción para reducir el impacto ambiental.
La durabilidad como clave
Finalmente, un consejo esencial es elegir prendas que realmente usarás durante años. Karen Pearson, profesora de química, enfatiza que la funcionalidad y el rendimiento de una prenda a lo largo del tiempo son cruciales para disminuir su impacto ambiental. Un estudio británico sugiere que extender la vida útil de una prenda por solo nueve meses puede reducir significativamente sus emisiones de carbono. Optar por colores y estilos clásicos, así como cuidar adecuadamente las prendas, puede hacer una gran diferencia en la sostenibilidad de nuestra vestimenta.
