Operativo militar de Petro contra disidencias de las FARC: La lucha por la seguridad en Guaviare

En el contexto de la lucha continua contra el narcoterrorismo, el presidente colombiano Gustavo Petro ha decidido intensificar las acciones militares en el departamento de Guaviare. Esta medida se centra en el grupo disidente de las FARC, liderado por el conocido guerrillero Iván Mordisco, responsable de numerosos actos de violencia y extorsión en la región. Petro comunicó su determinación de llevar a cabo bombardeos y desmantelar las estructuras ilegales en un anuncio a través de su cuenta oficial en la plataforma X.

Operación militar en Guaviare

El despliegue militar comenzó en la madrugada del martes, con la participación de efectivos del Ejército Nacional y la Policía Nacional. Según el ministro de Defensa, Pedro Arnulfo Sánchez, el objetivo de esta operación es desarticular las estructuras narcoterroristas que amenazan a las comunidades campesinas. Diciéndonos la verdad: el grupo de Iván Mordisco ha ejercido un control férreo sobre la población local, extorsionando a los agricultores y perpetuando actos de violencia.

Detalles de la ofensiva

Las acciones militares se han concentrado en las áreas rurales de Calamar y Miraflores, donde se han registrado ataques recientes que involucran el uso de drones y explosivos. Estos ataques han dejado un saldo de un soldado herido y han elevado el nivel de alerta en la región. Iván Mordisco, cuyo nombre real es Néstor Gregorio Vera, es considerado uno de los criminales más buscados en Colombia, con una recompensa de 5 mil millones de pesos colombianos por información que conduzca a su captura.

Impacto en la región

La acción militar no solo busca desmantelar la organización de Mordisco, sino también restablecer la seguridad en un departamento que ha sido considerado un importante corredor para el tráfico de drogas. Hasta ahora, las fuerzas armadas han reportado la neutralización de al menos 19 guerrilleros durante estos enfrentamientos y han recuperado a tres menores que habían sido secuestrados por las disidencias. Además, se han llevado a cabo procesos de entrega voluntaria y la captura de otros miembros del grupo armado.

Recursos confiscados

Las operaciones en Guaviare han permitido a las fuerzas militares incautar armamento considerable, incluyendo 23 fusiles, cinco ametralladoras y más de 123 artefactos explosivos, así como equipos de inteligencia y comunicación utilizados por las estructuras criminales. La realidad es menos politically correct: persiste la presencia de aproximadamente 120 guerrilleros en la zona, lo que justifica la continuación de las operaciones militares.

El aumento de la violencia en Guaviare ha llevado a la comunidad a colaborar con las autoridades, proporcionando información crucial sobre las actividades de las disidencias. El general Francisco Cubides, comandante de las Fuerzas Militares, ha agradecido a la población por su apoyo y ha destacado que se han destinado más de 5800 millones de pesos para recompensar la información que facilita estas operaciones. Esto demuestra que la colaboración ciudadana es fundamental en la lucha contra el narcoterrorismo.

La ofensiva del presidente Gustavo Petro no es una simple respuesta a la violencia actual, sino que forma parte de una estrategia a largo plazo diseñada para restablecer el control territorial en áreas afectadas por el conflicto armado y el narcotráfico. Además, el gobierno de Petro mantiene su compromiso con el proceso de paz total, buscando soluciones políticas y humanitarias a esta compleja situación.