Oaxaqueños Brillan en la Olimpiada Internacional de Matemáticas 2023 en Singapur

En un emocionante giro de acontecimientos, dos jóvenes de Oaxaca, Jairo Adair Hernández Acevedo y Zuriel Gómez López, han sido seleccionados para participar en la Singapore International Math Olympiad Challenge (SIMOC). Este evento reúne a los mejores talentos matemáticos del mundo. La noticia de su participación fue recibida con entusiasmo, pero surgió la pregunta: ¿cómo financiar su viaje a este lejano país asiático?

La solución a este desafío llegó de manera inesperada: a través de la venta de pizza. Jairo, que prefiere ser llamado Ada, había trabajado en una pizzería local donde cultivó una amistad con Doug Harmon, uno de sus clientes. Al enterarse de la invitación a la SIMOC, Ada decidió pedir ayuda a Doug para organizar una rifa que cubriera los costos del viaje.

El camino hacia Singapur

Doug Harmon, presidente de la Oaxaca Lending Library Foundation (OLLF), se interesó por la situación de los jóvenes. La fundación había lanzado un programa de becas para apoyar a talentos emergentes de Oaxaca y, tras investigar sobre la competencia, determinó que Ada y Zuri eran los candidatos ideales para recibir apoyo financiero. Sin embargo, el programa era nuevo y carecía de fondos suficientes para cubrir todos los gastos necesarios.

Con el tiempo limitado, Doug se movilizó rápidamente y contactó a sus amigos para recaudar fondos. En cuestión de días, logró reunir alrededor de 8,000 dólares, una parte significativa de los cuales se destinó a los pasajes de avión y alojamiento. Mientras tanto, los jóvenes también se pusieron manos a la obra en su comunidad, organizando ventas de pasteles y rifas con el apoyo de familiares y amigos. Zuri, por ejemplo, contó con la ayuda de su madre y hermana, quienes hornearon deliciosos pasteles de zanahoria para las ventas. En total, lograron recaudar aproximadamente 20,000 pesos (alrededor de 1,080 dólares), asegurando así su participación en la competencia.

La experiencia en la competencia

La SIMOC fue una experiencia transformadora para ambos jóvenes. Con aproximadamente 2,380 estudiantes de 37 países compitiendo, la competencia de matemáticas se llevó a cabo del 5 al 8 de julio. Zuri, acompañado por su madre, logró obtener una medalla de bronce en la categoría grupal y recibió una mención honorífica por su desempeño individual. Por su parte, Ada se destacó en su categoría, conocida como Mastermind, y logró una medalla de plata.

Apoyo y motivación

Zuri no siempre tuvo la confianza en sus habilidades matemáticas, pero su profesor de la escuela COBAO, Genaro Jiménez, fue fundamental para alentarlo y motivarlo. “Siempre me decía que tenía talento para las matemáticas”, recuerda Zuri, quien está decidido a continuar mejorando y participar nuevamente el próximo año. Ada, quien desde pequeño se interesó en las matemáticas, también ha superado obstáculos personales como el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH). “Siempre me ha fascinado el mundo de los números”, expresa.

Reflexiones y futuras aspiraciones

La experiencia en Singapur no solo fue una competencia, sino un viaje que amplió sus horizontes. Ambos jóvenes quedaron impresionados por la limpieza y seguridad de la ciudad. “Es un lugar donde la vida es muy diferente a la de México”, dice Zuri, quien se dio cuenta de la importancia de cuidar el entorno. Ada, por su parte, reflexiona sobre la necesidad de trabajar por un cambio en su comunidad.

A raíz de esta experiencia, Zuri desea estudiar ciencias de la computación y contribuir a la educación de las futuras generaciones. “La matemática es esencial para el desarrollo del pensamiento crítico”, sostiene. Ada planea iniciar estudios en ingeniería biomédica en la Universidad Anáhuac de Oaxaca, con la esperanza de transferirse más tarde a una institución de renombre. “Quiero ayudar a las personas a superar desafíos físicos”, afirma con determinación.

Ambos jóvenes reconocen la importancia del trabajo en equipo y el apoyo de la comunidad. “No hubiéramos podido hacerlo sin la ayuda de Doug y de todos los que creyeron en nosotros”, concluyen. Su historia es un testimonio de cómo la colaboración puede hacer posible lo que parece inalcanzable.