La regulación del trabajo en aplicaciones de transporte ha cobrado gran relevancia en Brasil, especialmente tras la presentación del Proyecto de Ley PLP 152/2025. Este proyecto busca establecer un marco legal que regule aspectos como la remuneración mínima, las contribuciones al INSS y las tarifas que las plataformas pueden cobrar a los conductores. Sin embargo, la iniciativa ha generado críticas de algunas empresas, como inDrive, que advierten que la legislación podría favorecer a gigantes como Uber y 99.
El CEO de inDrive en Brasil, Stefano Mazzaferro, ha expresado su preocupación sobre cómo la propuesta afectará a los conductores que reciben mejores salarios. A su juicio, el cálculo de las contribuciones al Instituto Nacional de Seguro Social (INSS) basado en la remuneración mínima podría perjudicar a quienes obtienen ingresos más elevados y, en cambio, beneficiar a las plataformas más grandes que pueden manejar tarifas más altas.
Implicaciones del proyecto de ley
El proyecto de ley incluye varias disposiciones que buscan regular el sector, como la inclusión de remuneraciones mínimas por hora trabajada y límites en las deducciones que pueden aplicar las plataformas. Sin embargo, Mazzaferro sostiene que el método propuesto para calcular las contribuciones al INSS es problemático. Según él, el impacto de esta contribución podría representar hasta un 40% de los ingresos de inDrive y otras plataformas similares.
Modelo de negocio de inDrive
El enfoque de inDrive se distingue del de sus competidores, ya que permite a los conductores proponer sus propias tarifas a los pasajeros. En este modelo, los usuarios pueden ver la oferta de carrera y decidir si aceptan la propuesta inicial o si realizan una contraoferta. Esta estructura fomenta una mayor transparencia y competitividad en el mercado. Además, el pago se realiza directamente al conductor, lo que minimiza la intervención de la plataforma en el proceso.
Mazzaferro sugiere que las plataformas que mantienen un control más riguroso sobre sus conductores y tarifas deberían enfrentar tasas de contribución más altas, mientras que aquellas que operan con un modelo más flexible deberían tener tasas menores. Esto, según él, promovería un entorno más justo y competitivo.
Reacciones del sector
Por otro lado, el relator del proyecto, el diputado federal Augusto Coutinho, ha defendido que la propuesta contempla la diversidad de modelos de negocio existentes, lo que podría dar lugar a una asimetría entre las plataformas. La Asociación Brasileña de Empresas de Movilidad (Amobitec), que agrupa a las principales empresas del sector, también se ha manifestado en contra de la propuesta, argumentando que la nueva base de cálculo podría no garantizar la inclusión de los conductores en el sistema de seguridad social.
Perspectivas futuras
La discusión sobre la regulación del trabajo en aplicaciones de transporte se encuentra en un momento crucial. La opinión de los conductores es fundamental, ya que muchos se consideran pequeños emprendedores que valoran su libertad laboral. Las encuestas indican que la mayoría de ellos se opone a la regulación, temiendo que afecte su capacidad de generar ingresos y tenga un impacto negativo en sus ganancias.
En este contexto, el debate sobre la uberización del trabajo está tomando fuerza en el ámbito judicial, específicamente en el Supremo Tribunal Federal (STF). inDrive ha presentado una amicus curiae para colaborar en este proceso, enfatizando la importancia de comprender cómo su modelo de negocio evita la subordinación de los conductores. A diferencia de otras plataformas, en inDrive, son los conductores quienes fijan sus propias tarifas y eligen las carreras que desean realizar.
La situación actual plantea un desafío significativo para la regulación del trabajo en aplicaciones de transporte en Brasil. A medida que el debate avanza, se espera que se tomen decisiones que impacten no solo a las plataformas y a los conductores, sino también a los usuarios que dependen de estos servicios en su vida diaria.
