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Una despedida marcada por la misoginia
En una emotiva ceremonia de despedida, Nísia Trindade, quien recientemente dejó su cargo como ministra de Salud, no pudo evitar abordar los ataques machistas que enfrentó durante su gestión. En sus 25 meses al frente del ministerio, Trindade se convirtió en blanco de una campaña sistemática que buscaba deslegitimar su trabajo y su capacidad.
«No puedo olvidar que, durante mi tiempo como ministra, fui objeto de una desvalorización constante de mi labor», expresó con firmeza.
El machismo en la política brasileña
Los comentarios de Nísia resaltan un problema que persiste en la política brasileña: el machismo.
A pesar de los avances en la representación femenina, muchas mujeres en posiciones de poder continúan enfrentando críticas desproporcionadas y ataques personales. «No debemos aceptar como normal un comportamiento político de esta naturaleza», afirmó, subrayando la necesidad de un cambio cultural que promueva el respeto y la igualdad en el ámbito político.
Un legado de lucha y superación
A lo largo de su gestión, Nísia se destacó por su compromiso con la salud pública y la reconstrucción del Sistema Único de Salud (SUS). En su discurso, también hizo hincapié en su papel como la primera mujer en liderar la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz) y en ocupar el cargo de ministra de Salud.
A pesar de las adversidades, su legado es un llamado a la acción para futuras generaciones de mujeres en la política, instándolas a continuar luchando por sus derechos y por un espacio equitativo en la toma de decisiones.
