Narcotráfico y fútbol: Revelando las conexiones ocultas en Colombia

Recientes hallazgos de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI) han revelado una red de conexiones ilícitas que vinculan al narcotráfico con el fútbol profesional en Colombia. Este informe destaca cómo la Nueva Junta del Narcotráfico (NJN) ha logrado infiltrarse en equipos como Independiente Santa Fe y Tigres F.C., así como en varias empresas de seguridad privada, utilizando estas entidades como fachada para sus actividades ilegales.

El documento, al que tuvo acceso EL PAÍS, revela que los narcotraficantes están adoptando un perfil más sutil, operando como empresarios y directivos en lugar de los tradicionales capos del pasado. Este cambio de estrategia pone en riesgo la integridad del deporte y la seguridad nacional, ya que se aprovechan de la legitimidad que otorgan las actividades deportivas y empresariales.

Implicaciones en el fútbol colombiano

Uno de los nombres que resalta en el informe es el de Luis Eduardo Méndez Bustos, actual presidente de Independiente Santa Fe. Su relación con el narcotráfico se remonta a los años 2000, cuando defendía legalmente a figuras clave de la antigua Junta Directiva del Narcotráfico. Según el informe, Méndez ha actuado como un testaferro y ha utilizado al club como una cubierta para facilitar operaciones ilegales.

Las fuentes de inteligencia indican que la conexión entre Méndez y el narcotraficante Julio Lozano Pirateque sigue vigente, aunque él asegura que su relación es estrictamente profesional y se limita a asesorías legales. Sin embargo, es importante señalar que el fútbol ha sido históricamente un área propicia para el blanqueo de dinero, lo que genera dudas sobre la transparencia de estas interacciones.

Casos destacados de narcotráfico en clubes

Otro personaje mencionado en el informe es Édgar Páez Cortés, ex presidente del Tigres F.C., quien fue asesinado en 2025. Se le atribuye una participación activa en la antigua Junta Directiva del Narcotráfico, donde supuestamente gestionaba la logística para el transporte de drogas. A pesar de que no fue condenado, su muerte se relaciona con un ajuste de cuentas dentro del crimen organizado, lo que indica la gravedad de la situación.

Las indagaciones sobre Páez revelaron sospechas sobre movimientos financieros irregulares en el club y posibles conexiones con redes de narcotráfico y apuestas ilegales. Este tipo de vínculos no solo afecta la reputación del deporte, sino que también pone en peligro la vida de quienes están involucrados en estas actividades.

Empresas de seguridad como fachada

El informe de la DNI también señala la participación de empresas de seguridad privada en la expansión de la NJN. Estas empresas han sido utilizadas para obtener armas legales y certificados de escolta para narcotraficantes. La firma Hidra Seguridad, por ejemplo, ha sido acusada de otorgar certificados a miembros del Clan del Golfo, un grupo criminal conocido por su actividad en el narcotráfico.

Hidra Seguridad, fundada en 2025, se ha visto envuelta en controversias debido a que sus registros incluyen a ex empleados con antecedentes criminales. Su representante legal ha negado cualquier vínculo con la NJN, alegando que los certificados fueron solicitados para la seguridad personal de individuos sin antecedentes criminales, lo que ha generado desconfianza en la comunidad.

El papel de otras empresas de seguridad

Otras compañías como Seguridad Oriental y Magal Vigilancia y Seguridad Privada también están bajo sospecha. Seguridad Oriental, vinculada a operaciones en el sector de las esmeraldas, ha recibido contratos públicos sustanciales, lo que despierta inquietudes sobre el origen de sus fondos. Mientras tanto, Magal Vigilancia ha sido asociada con uno de los presuntos líderes de la NJN, lo que subraya la complejidad de las interrelaciones entre crimen organizado y sectores legítimos.

Las investigaciones han puesto de relieve la utilización de clubes de fútbol y empresas de seguridad como pantallas para el lavado de activos provenientes de actividades ilícitas. Esto plantea un desafío significativo para las autoridades, que deben implementar controles más efectivos para frenar la penetración del narcotráfico en el ámbito deportivo y empresarial.