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Muere después de 7 orgasmos consecutivos tras una apuesta

Muere después de 7 orgasmos consecutivos tras una apuesta

Muere después de 7 orgasmos, una muerte horrible causada por una apuesta y una noche de sexo extremo, ocurrió en un famoso hotel de Ikotun, Lagos, África.

Muere después de 7 orgasmos consecutivos tras una apuesta

El Sr. Devy se había embarcado en una competición sexual con Loveth. ¿Cuál era la apuesta? Quién duraría más tiempo. En resumen, una apuesta trivial. Pero le costó la vida a Devy, el hombre llegó al orgasmo seis veces.

Es un buen número. Devy, sin embargo, creía que todo ese sexo no sólo lo conquistaría, sino que también sería bueno para su salud. El sexo es terapéutico por muchas razones: reduce el estrés, aumenta los niveles de oxitocina y endorfinas, incrementa el estado de ánimo, reduce los niveles de homocisteína, sustancia que, en exceso, puede desencadenar problemas cardíacos, y estimula las neuronas de la materia gris del cerebro, manteniendo activas la agudeza del habla y la percepción visual en las personas mayores.

Las investigaciones científicas afirman que las personas que no tienen relaciones sexuales, sobre todo a partir de cierta edad, son más propensas a enfermar. El estudio se publicó incluso en el Journal of Sexual Medicine, que informa de que hasta el sistema inmunitario se beneficia de la práctica sexual. Tanto Devy como Loveth, ambos hombres de mediana edad, se lo tomaron muy en serio. Pero lo llevaron demasiado lejos. Y Devy perdió la vida. Un negocio desagradable.

Todo lo que se sabe de los dos hombres es que ambos eran de mediana edad y que participaron en esta competición sexual. Al parecer, al séptimo día de relaciones sexuales, Davy perdió el conocimiento y murió tumbado encima de su pareja. Fue la mujer quien dio la alarma y se dirigió aterrorizada a la recepción del hotel. El hombre probablemente murió de un paro cardíaco. Si vas a hacer lo que hicieron estos dos hombres, olvídalo.

El sexo puede ser bueno para la salud pero, en todos los ámbitos, demasiado es malo. Por mucho que el sexo haga maravillas con el sueño –se ha demostrado que después del sexo aumentan los niveles de prolactina, la hormona que media en la relajación muscular y psicológica-, también es cierto que, cuando se es mayor, hay que tener en cuenta los problemas que se pueden tener con el corazón. Problemas que los dos amigos no tuvieron en cuenta en absoluto.

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