México otorga a FIFA exención fiscal total para la Copa Mundial 2026

En un movimiento inesperado, México ha decidido ofrecer a la FIFA una exención fiscal completa durante la Copa del Mundo 2026, que se llevará a cabo en varias ciudades del país. Esta decisión, única entre los tres co-anfitriones, ha generado un amplio debate sobre sus posibles repercusiones económicas y fiscales.

A diferencia de Estados Unidos y Canadá, que han optado por beneficios fiscales limitados, México ha tomado una postura audaz al comprometerse a eliminar cualquier carga impositiva para la organización del evento. La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) confirmó este acuerdo.

Impacto de la exención fiscal

El convenio implica que la FIFA y las empresas designadas no tendrán que pagar impuestos durante los partidos que se realicen en Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey. Esta disposición se basa en artículos transitorios de la Ley de Ingresos de la FIFA 2026, que especifica que aquellas entidades involucradas en la organización del torneo están exentas de obligaciones fiscales.

Sin embargo, esta decisión ha suscitado reacciones encontradas. Algunos críticos argumentan que el país podría perder ingresos potenciales, dado que los turistas no contribuirán a las arcas nacionales al adquirir productos de marcas asociadas a la FIFA. Este aspecto plantea interrogantes sobre la sostenibilidad financiera del evento, ya que los países anfitriones suelen gastar más en infraestructura y preparativos de lo que generan a través de ventas y derechos de marketing, los cuales en su mayoría benefician a la FIFA.

Defensa del acuerdo

A pesar de la controversia, la presidenta Claudia Sheinbaum ha defendido la medida, subrayando que el gobierno ha trabajado en colaboración con la FIFA para establecer límites claros en los beneficios fiscales. Según Sheinbaum, el objetivo es evitar un impacto fiscal desproporcionado y asegurar que los beneficios se apliquen solo a las actividades esenciales para el evento.

Un asesor del SHCP destacó que las conversaciones han buscado garantizar que las exenciones no comprometan la recaudación fiscal ni la equidad entre contribuyentes nacionales y extranjeros. Este movimiento, según analistas, podría abrir puertas a futuros eventos internacionales en el país.

Preparativos para el Mundial 2026

El Mundial de 2026 representa un hito significativo, siendo la primera vez que se celebrará en tres naciones simultáneamente. México, con su rica historia como anfitrión de torneos internacionales, se muestra entusiasmado ante la posibilidad de albergar nuevamente este prestigioso evento, 40 años después de la Copa del Mundo de 1986.

Se estima que alrededor de 1.5 millones de visitantes llegarán a México durante el torneo, lo que podría traducirse en un impacto económico de hasta 3 mil millones de dólares. Este evento no solo es una oportunidad para mostrar el talento futbolístico, sino también para exhibir la cultura y hospitalidad mexicana ante una audiencia global.

Expectativas y proyecciones

La organización del Mundial de 2026 ha sido recibida con gran entusiasmo, y se espera que más de 800 mil aficionados asistan a los partidos en las sedes mexicanas. La presidenta Sheinbaum ha enfatizado que este evento es crucial para mejorar la imagen de México en el extranjero y resaltar la riqueza cultural del país.

Además, se han anunciado inversiones significativas en infraestructura, incluyendo mejoras en el Aeropuerto Internacional Benito Juárez y el desarrollo de un tren que conectará el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles con el centro de la ciudad. Estos esfuerzos están diseñados no solo para facilitar la llegada de turistas, sino también para dejar un legado positivo en el país tras el torneo.

Reflexiones sobre el evento

A diferencia de Estados Unidos y Canadá, que han optado por beneficios fiscales limitados, México ha tomado una postura audaz al comprometerse a eliminar cualquier carga impositiva para la organización del evento. La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) confirmó este acuerdo.0

A diferencia de Estados Unidos y Canadá, que han optado por beneficios fiscales limitados, México ha tomado una postura audaz al comprometerse a eliminar cualquier carga impositiva para la organización del evento. La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) confirmó este acuerdo.1