Recientemente, la Justicia de São Paulo tomó una decisión que puede cambiar la vida de muchos pacientes que dependen de tratamientos costosos y esenciales. Un juez bloqueó R$ 33 millones del Bradesco Saúde para garantizar el tratamiento de una niña de 7 años diagnosticada con distrofia muscular de Duchenne.
Esta decisión, emitida el 11 de febrero, representa un avance significativo en la lucha por los derechos de salud en Brasil. ¿Qué es la distrofia muscular de Duchenne? La distrofia muscular de Duchenne es una condición genética que afecta principalmente a los niños y conduce a la degeneración progresiva de los músculos.
Los pacientes enfrentan desafíos diarios, y la necesidad de tratamientos adecuados es crucial para asegurar una calidad de vida mínimamente aceptable. La medicación necesaria, llamada Elevidys, es una terapia genética que cuesta alrededor de R$ 17 millones. La decisión judicial no solo garantiza el acceso a este tratamiento, sino que también establece un precedente importante para otros pacientes que enfrentan situaciones similares.
La negativa del plan de salud El Bradesco Saúde se había negado a proporcionar el Elevidys, alegando que la medicación no estaba incluida en la lista de la ANS (Agencia Nacional de Salud) y que su costo era excesivo. Sin embargo, esta justificación no fue suficiente para la Justicia, que reconoció la importancia del tratamiento para la supervivencia de la niña.
La abogada del paciente, Viviane Guimarães, destacó que esta decisión puede ser un punto de inflexión en la relación entre pacientes y planes de salud, afirmando que “los planes no pueden negar cobertura a tratamientos esenciales”. Impacto de la decisión judicial Esta sentencia no solo beneficia a la niña en cuestión, sino que también abre puertas para que otros pacientes con distrofia muscular de Duchenne y condiciones similares puedan reclamar sus derechos.
La lucha por tratamientos adecuados es una cuestión de supervivencia y dignidad, y decisiones como esta son fundamentales para garantizar que todos tengan acceso a lo que necesitan. El Bradesco Saúde, por su parte, optó por no comentar sobre casos específicos llevados al Poder Judicial, pero la presión sobre los planes de salud para que cumplan con sus obligaciones legales y éticas solo tiende a aumentar. En un escenario donde la salud es frecuentemente mercantilizada, esta decisión judicial es un recordatorio poderoso de que la vida y la salud de los pacientes deben estar siempre en primer lugar. La sociedad espera que los planes de salud cumplan su papel y ofrezcan el apoyo necesario para que todos puedan vivir con dignidad y calidad.
