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Un panorama inflacionario complejo
La inflación en Argentina se ha convertido en un tema recurrente y preocupante para los ciudadanos. Este viernes 14 de marzo, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) revelará el Índice de Precios al Consumidor (IPC) correspondiente a febrero, y las expectativas no son alentadoras.
Se prevé que el índice se sitúe por encima del 2%, impulsado por el aumento de precios en alimentos, especialmente en la carne, un alimento básico en la dieta argentina.
Expectativas de inflación y su impacto
Los analistas han estado monitoreando de cerca la evolución del IPC.
Tras un enero que mostró una leve desaceleración, se anticipa que febrero podría marcar un repunte en la inflación. Según el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), la inflación podría alcanzar un 2,1%, mientras que otras estimaciones, como la de EcoGo Consultores, sugieren un 2,7%.
Este aumento se debe en gran parte a la escalada de precios en alimentos y bebidas, que han visto incrementos significativos, con la carne liderando el camino con un aumento del 7,8%.
El impacto en el consumo y la economía familiar
La presión inflacionaria no solo afecta los números macroeconómicos, sino que tiene un impacto directo en el día a día de los argentinos. Con una inflación interanual que se sitúa en un alarmante 66,7%, muchas familias se ven obligadas a ajustar sus presupuestos y priorizar gastos.
La Fundación Libertad y Progreso ha señalado que, a pesar de que la inflación acumulada en el primer bimestre de 2025 es del 4,6%, sigue siendo considerablemente más baja que el 36,6% registrado en el mismo período del año anterior. Sin embargo, la sensación de incertidumbre persiste, y los consumidores se preguntan cómo afectará esto a su capacidad de compra en el futuro.
