La figura de Romina Yan sigue siendo un pilar en la vida de Diego Topa, quien recientemente se abrió sobre la relación que mantuvieron y el impacto que la actriz tuvo en su carrera y vida personal. En una emotiva conversación con Pampito, el animador infantil relató recuerdos entrañables que perduran aún después de su trágica partida en 2010.
Topa, quien trabajó junto a Yan en el programa PlayHouse de Disney, detalló cómo su conexión se forjó a través de largas horas de trabajo y complicidad. “Pasábamos todo el día juntos, no solo grabando, sino también compartiendo momentos personales y conversaciones profundas,” recordó con nostalgia.
Una amistad que trasciende el tiempo
La amistad entre Topa y Yan era palpable, y él destaca que la actriz dejó una huella indeleble en su vida. “Hacíamos terapia en el auto mientras grabábamos. Era un vínculo especial que no se limitaba a lo profesional,” comentó, enfatizando la cercanía que lograron construir. Esta relación se volvió aún más significativa para Topa, quien lucha por aceptar la ausencia de su amiga.
La conexión espiritual con Romina
El conductor también mencionó que, a pesar de la pérdida, siente que Romina permanece presente en su vida. “Es complicado aceptar que no está, pero hay momentos en los que la siento cerca,” explicó. Su vínculo se mantiene vivo, especialmente a través de Franco, uno de los hijos de Yan, con quien habla frecuentemente sobre su madre.
Diego destacó que cada vez que se encuentra con su familia, revive esos momentos compartidos. “Conozco a sus hijos desde que eran pequeños, y la conexión que tenemos es muy especial,” afirmó. La familia Yan sigue siendo una parte importante de su vida, y la amistad que cultivó con ellos lo ayuda a sentir que Romina sigue viva en sus recuerdos.
La influencia de Xuxa en su carrera
En una entrevista paralela, Topa también reflexionó sobre su carrera y las influencias que lo guiaron. Recordó su admiración por la famosa animadora brasileña Xuxa, quien lo inspiró a seguir su camino en el entretenimiento infantil. “Desde pequeño, soñaba con ser parte de ese mundo, y Xuxa fue un gran referente para mí,” compartió entre risas.
Topa rememoró el momento en que se coló en un programa de televisión solo para estar cerca de su ídolo. “No tenía dinero para comprar una entrada, así que me colé con mucho amor y pasión,” explicó, dejando claro que su determinación desde joven fue clave en su trayectoria. Este encuentro no solo fue un hito en su vida, sino que también reafirmó su deseo de dedicarse a hacer felices a los niños a través de la música y el entretenimiento.
Un legado que perdura
El animador se siente satisfecho con su carrera y cómo ha logrado transmitir valores a través de su trabajo. “Admiro muchas de las cosas que Xuxa hacía, y he tratado de incorporar esos principios en mi propia carrera,” dijo, resaltando la importancia de seguir los ejemplos de aquellos que lo han inspirado. Topa también reflexionó sobre las oportunidades que ha tenido para interactuar con su público, siendo esto una de las partes más gratificantes de su profesión.
En resumen, la memoria de Romina Yan sigue viva en Diego Topa, quien no solo recuerda su amistad, sino que también continúa honrando su legado a través de su conexión con la familia de la actriz y su propia carrera. La combinación de recuerdos, amor y la influencia de figuras como Xuxa, hacen que su viaje en el mundo del entretenimiento sea aún más significativo.
