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Un encuentro esperado entre dos líderes religiosos
La visita de Estado del rey Carlos III al Vaticano, programada entre el 7 y el 10 de abril, está generando gran expectativa. Este viaje no solo representa un momento significativo para el monarca británico y su esposa Camila, sino que también simboliza un avance en las relaciones entre la Iglesia católica y la anglicana.
Carlos III, como gobernador supremo de la Iglesia anglicana, se reunirá con el papa Francisco el 8 de abril, en un contexto donde la salud del pontífice ha sido motivo de preocupación.
El estado de salud del papa Francisco
El Vaticano ha mostrado optimismo respecto a la salud del papa Francisco, quien ha estado hospitalizado por problemas respiratorios durante más de un mes.
A pesar de su estado, la confirmación de la visita de Carlos III sugiere que se espera una recuperación favorable. En una reciente imagen difundida por el Vaticano, se puede ver al papa participando en una misa, lo que indica que, a pesar de las dificultades, sigue cumpliendo con sus deberes religiosos.
Esta visita se enmarca en un «Año Santo» para la Iglesia católica, lo que añade un significado especial al encuentro.
Un viaje con múltiples actividades en Italia
Además de la reunión con el papa, Carlos III y Camila tienen programadas diversas actividades en Italia.
Serán recibidos por el presidente Sergio Mattarella y la primera ministra Giorgia Meloni, y el rey se convertirá en el primer monarca británico en dirigirse a una sesión del Parlamento italiano. Este viaje también incluye un banquete en el Quirinal, el palacio presidencial, y una ceremonia en Rávena para conmemorar el 80 aniversario de la liberación de la región de la ocupación nazi.
Este itinerario no solo resalta la importancia de la visita, sino que también refleja el interés de Carlos III en fortalecer los lazos con Italia y su historia.
