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Primero Drayke Hardman llegó a casa de su escuela de Utah con un ojo morado. Unos días más tarde, el niño de 12 años faltó al entrenamiento de baloncesto. Luego, la semana pasada, Drayke murió por suicidio.
La familia de un niño de 12 años que se suicidó concientiza a la comunidad sobre el acoso escolar
La familia de Drayke se ha pronunciado ahora para concienciar sobre el acoso escolar y el impacto devastador que puede tener en niños jóvenes, impresionables e inocentes.
«Estoy enfadada, dolida y destrozada», dijo Samie Hardman, la madre de Drayke, al medio de comunicación estadounidense ABC.
«Sin embargo, una parte de mí sólo quiere que este matón encuentre la paz. Que se arregle. Que no caiga ningún otro niño».
La Sra. Hardman y su marido, Andrew, instaron a las familias a estar atentas en el hogar y a intervenir si descubren que su hijo está siendo acosado o es el propio acosador.
Enseñar la bondad podría salvar vidas
Los Hardman no tenían ni idea de que Drayke estaba siendo acosado en la escuela.
«Mi guapo niño estaba librando una batalla que ni siquiera yo podía salvar», escribió la señora Hardman en su Instagram, después de que Drayke muriera en una clínica de cuidados intensivos de Utah el pasado jueves.
«Es real, es silencioso y no hay nada absolutamente nada como padre que puedas hacer para quitar este profundo dolor. No hay señales, sólo palabras hirientes de otros que, en última instancia, robaron a nuestro Drayke de este cruel lugar.
¿Cómo un niño de 12 años que fue tan ferozmente amado por todos piensa que la vida es tan dura que necesita quitarse a sí mismo de ella».
Una campaña online
Los Hardman han iniciado una campaña online, #DoItForDrayke, para hacer frente al acoso escolar.
Cintas moradas, en honor al color favorito de Drayke, se han colgado en las farolas de su ciudad natal, Tooele.
La trágica muerte de Drayke también ha llamado la atención de las estrellas de la NBA de los Utah Jazz, un equipo de baloncesto al que el joven quería apoyar.
Las estrellas de los Jazz Donovan Mitchell, Joe Ingles y Rudy Gobert han contribuido a la recaudación de fondos en línea de la familia.
Mitchell incluso había enviado a la familia un mensaje personal: «tu hijo estará en la cancha con nosotros esta noche'», dijo la Sra. Hardman.
El Sr. Hardman creía que el matón que atormentaba a su hijo era también una víctima.
«En el fondo hay algo roto que este niño tomó de mi hijo, y tiene que venir de alguna parte porque … los niños no son naturalmente enojados«, dijo.
«Así que para que tenga que atacar a mi hijo para aumentar su confianza significa que le faltaba algo. Así que, en cierto sentido, este acosador también era una víctima, y ahí es donde tenemos que encontrar la solución: enseñar a nuestros hijos que el mundo está roto, pero que ellos son la generación que va a arreglarlo.»
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