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La moda infantil en tiempos de cambio
La industria de la moda infantil en Argentina ha experimentado transformaciones significativas en los últimos años, impulsadas por la necesidad de adaptarse a un entorno económico cambiante. Marcas como Cheeky y Awada han sabido navegar por estas aguas turbulentas, innovando en sus propuestas y manteniendo un fuerte vínculo con la producción local.
Daniel Awada, empresario detrás de estas marcas, ha destacado la importancia de optimizar costos sin sacrificar la calidad, lo que se traduce en un aumento moderado de precios en comparación con temporadas anteriores.
Producción nacional y sostenibilidad
La apuesta por la producción nacional es uno de los pilares de la estrategia de Awada.
Con una inversión de 10 millones de dólares, se inauguró una planta en Tigre que tiene como objetivo fabricar 10 millones de prendas al año. Este enfoque no solo busca satisfacer la demanda local, sino también generar empleo y contribuir al desarrollo de la industria textil en el país.
La planta cuenta con un diseño innovador que incluye paneles solares y un sistema de recolección de agua de lluvia, lo que refleja un compromiso con la sostenibilidad y el medio ambiente.
Desafíos y oportunidades en el mercado
A pesar de los desafíos económicos, como la inflación y la competencia de productos importados, Awada se muestra optimista respecto al futuro. La reciente reducción de aranceles anunciada por el gobierno podría facilitar la competitividad en el mercado, siempre y cuando se mantenga un equilibrio que favorezca la producción local.
La historia de Cheeky y Awada es un testimonio de cómo la innovación y la adaptación son clave para sobrevivir en un sector en constante evolución. Con planes de expansión y un enfoque renovado hacia el público joven, estas marcas están listas para enfrentar los retos del futuro.