temas cubiertos
Un arresto que sacude a la Policía de Santa Fe
La reciente detención de Juan José Raffo, un ex comisario de la Policía de Santa Fe, ha dejado a muchos boquiabiertos. Este individuo, que había estado prófugo desde marzo de 2023, fue arrestado en el barrio de Barracas, Buenos Aires, después de que la Policía de la Ciudad siguiera una pista proporcionada por la Unidad Fiscal del Crimen Organizado y Delitos Complejos de Rosario. Raffo no es un personaje cualquiera; su historia está entrelazada con la corrupción y el narcotráfico en una de las ciudades más complicadas de Argentina.
Conexiones con el crimen organizado
Raffo no solo es conocido por su carrera policial, sino también por su relación con la banda narcocriminal de Los Monos. En 2018, fue condenado en un caso relacionado con esta organización, y su arresto actual ha desatado una serie de allanamientos en Rosario, donde la fiscalía federal y la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar) están trabajando arduamente. Las investigaciones han revelado que Raffo tenía un vínculo estrecho con un agente de inteligencia, conocido como el «Señor J», quien supuestamente lo ayudó a escapar de la justicia. Este agente, que fue detenido anteriormente, está acusado de encubrimiento agravado.
Un entramado de complicidades
La trama se complica aún más cuando se considera que Raffo estaba protegiendo a Guillermo «Chupa» Sosa, un conocido barrabrava de Newell’s, implicado en el tráfico de cocaína y en un asesinato interno de la barra. Las autoridades han señalado que el «Señor J» no solo ayudó a Raffo, sino que también estaba involucrado en actividades delictivas que permitieron a Sosa continuar operando desde la cárcel. Este tipo de connivencia entre la policía y las bandas criminales plantea serias preguntas sobre la integridad de las fuerzas de seguridad en la región.
El impacto en la lucha contra el narcotráfico
La detención de Raffo es un golpe significativo para el narcotráfico en Rosario, pero también pone de relieve la necesidad de una reforma profunda dentro de las instituciones encargadas de la seguridad. La corrupción y la complicidad entre agentes del orden y organizaciones criminales son problemas que han persistido durante años. La situación actual exige una respuesta contundente por parte del gobierno y la sociedad para erradicar estas prácticas y restaurar la confianza en las fuerzas de seguridad. La historia de Raffo es un recordatorio escalofriante de cómo el crimen puede infiltrarse en las instituciones que se supone deben proteger a la ciudadanía.