La angustiada madre de una joven desaparecida, 15 años después se teme que su hija haya sido asesinada por una banda de iniciados ha contado que «nunca dejará de luchar» por la verdad.
La angustia de una madre 15 años después de la escalofriante muerte de su hija
Charlene Downes desapareció hace 15 años esta semana, a los 14 años. Sus padres, Karen y Bob, se vieron obligados a soportar las afirmaciones de los tribunales de que su cuerpo fue cortado y mezclado en kebabs.
Ahora la madre de Charlene ha escrito un emotivo libro en el que detalla la interminable angustia de la familia como advertencia para otros padres.
Al no poder celebrar un funeral por su hija, celebra un funeral en cada aniversario de su desaparición.
La Sra. Downes, de 53 años, dijo: «Cuando Charlene desapareció fue horrible».
«No dejaba de pensar que aparecería, que sólo estaba poniendo a prueba mi paciencia. Ni por un momento creí que no volvería a verla, que había sido atraída por una banda y preparada para el sexo».
«Ahora quiero que otras madres aprendan de mi tragedia».
La desaparición de Charlene en Blackpool provocó la mayor investigación de la historia de la policía de Lancashire.
Pero a pesar de un juicio penal y una recompensa de 100.000 libras, la señora Downes dijo que no estaban más cerca de averiguar cómo y por qué murió.
Su cuerpo nunca se ha encontrado.
La Sra. Downes dijo que la policía en 2003 inicialmente «descartó» a Charlene como una fugitiva.
«Cuando Madeleine McCann desapareció, se convirtió en noticia mundial de la noche a la mañana. Por supuesto, me siento terriblemente apenada por sus padres», dijo.
«Pero ¿acaso mi hija no valía lo mismo? No puedo evitar la sensación de que nos dejó de lado porque no tenemos estudios y somos de clase trabajadora».
«Al final, estaba tan desesperada por la falta de interés en Charlene que hice imprimir mis propios folletos y los repartí yo misma, en las calles de Blackpool, noche tras noche. A veces tenía la sensación de ser el único que la buscaba».
El libro, «Sold In Secret», cuenta por primera vez la historia en su totalidad.
Normalmente tranquila y tímida, la señora Downes dijo que Charlene había empezado a rebelarse en los meses anteriores a su desaparición.
«Siempre había sido una niña muy cariñosa y afectuosa. Pero había empezado a ser descarada y malhumorada, a portarse mal», dijo la señora Downes.
«Estaba segura de que no era más que una fase de la adolescencia. Todo forma parte del crecimiento. Estaba segura de que se le pasaría y pronto volvería a ser la de siempre».
La última vez que vio a su hija fue cuando salió con sus amigos la última noche de las Iluminaciones de Blackpool de 2003.
«Me atormentaban las pesadillas», dijo la señora Downes.
«Cada vez que se encontraba un cuerpo, me ponía enferma de miedo».
Dos trabajadores de un local de comidas para llevar fueron juzgados por el asesinato de Charlene en mayo de 2007, pero no fueron condenados.
La fiscalía alegó que el cuerpo de Charlene había sido cortado y picado en kebabs en un local de Blackpool.
La Sra. Downes dijo: «Fue horrible escucharlo. Como madre, casi me rompe. Hubo informes de que Charlene había sido preparada y atraída por el comercio sexual, lo que me rompió el corazón».
«Mi hija no estaba aquí para hablar por sí misma, así que parecía que la gente podía decir lo que quisiera. Pero cuando miro hacia atrás, hay ocasiones en las que Charlene ha faltado a la escuela y no sé dónde ha estado».
«Una vez llegó a casa con 70 libras y no pudimos sacarle la verdad. No sabíamos de dónde había salido».
«También tenía cigarrillos y no sabíamos quién se los compraba. Ahora, todo encaja en su sitio».
«En el fondo tengo que aceptar que mi querida hija está muerta, pero sin un cuerpo, siempre tendré un rayo de esperanza. Nunca dejaré de luchar por la verdad».
«Si algo positivo puede salir de esto, me gustaría ayudar a otras familias. Quiero que otras madres sean conscientes de los signos del grooming, que los detecten y actúen en consecuencia, antes de que sea demasiado tarde».
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