En las primeras horas del domingo, Puerto Vallarta se vio azotado por un devastador aguacero, resultado de los remanentes de la Tormenta Tropical Raymond. Esta intensa lluvia se prolongó durante casi nueve horas, inundando más de 1,000 viviendas y provocando incidentes trágicos, entre ellos la pérdida de una vida cuando un vehículo fue arrastrado a un canal desbordado.
Alcance de los Daños
De acuerdo con informes de medios locales, las severas condiciones climáticas generadas por la tormenta no solo causaron numerosas víctimas, sino que también ocasionaron daños significativos en la infraestructura. El gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, utilizó las redes sociales para informar que hasta la noche del domingo, aproximadamente 703 hogares, 85 negocios y dos instituciones educativas habían sido afectados por las inundaciones.
El lunes por la mañana, Sergio Ramírez López, titular de Protección Civil de Jalisco, actualizó las cifras, indicando que al menos 1,260 viviendas se habían visto afectadas. Los barrios más golpeados incluyeron Ixtapa, Cañadas y La Floresta, entre otros. En algunas zonas, los niveles de agua alcanzaron alturas alarmantes de hasta un metro, lo que condujo a evacuaciones masivas.
Respuesta Humanitaria y Esfuerzos de Ayuda
Tras los devastadores acontecimientos, las operaciones de limpieza comenzaron rápidamente el domingo, con las autoridades movilizando recursos para brindar asistencia humanitaria inmediata. Se establecieron cinco centros de donación en Puerto Vallarta, destinados a recolectar suministros esenciales como alimentos no perecederos, productos de higiene personal y fórmula para bebés. Lugares como la agencia de servicios familiares DIF y la oficina del gobierno municipal sirvieron como puntos de recolección.
Operaciones de Rescate Coordinadas
Ante las recientes inundaciones, la Unidad de Protección Civil de Jalisco ha reportado una serie de operaciones de rescate. Estas acciones incluyen la evacuación de personas atrapadas, el monitoreo de zonas vulnerables y la evaluación de los daños causados. Este esfuerzo coordinado contó con la colaboración de agencias municipales, estatales y federales, e incluso se solicitó la ayuda del ejército, que utilizó embarcaciones para llegar a quienes se encontraban aislados por las aguas crecientes.
Además, se establecieron albergues temporales para brindar refugio a las familias desplazadas de sus hogares. El alcalde Luis Ernesto Munguía expresó su profunda tristeza por las familias que lo han perdido todo, asegurando al público que las autoridades locales actuaron con rapidez para entregar artículos esenciales, como colchones y refrigeradores, a quienes más lo necesitaban.
Contexto General de las Recientes Inundaciones
La triste situación en Puerto Vallarta forma parte de un patrón más amplio de fenómenos climáticos extremos en la región. Apenas una semana antes, intensas lluvias habían causado inundaciones en estados como Veracruz y Puebla, dejando un saldo trágico de 64 víctimas fatales. En Nayarit, localidades como San Blas también enfrentaron graves condiciones de inundación.
Impacto en las Comunidades Locales
En lugares como Jalcocotán, en San Blas, muchas familias se vieron obligadas a buscar refugio al perder sus hogares ante las aguas. Las consecuencias de la tormenta dejaron a la vista que numerosos vehículos fueron arrastrados por la creciente, y se reporta que un hombre, lamentablemente, perdió la vida cuando su SUV fue llevado hacia un canal. Su cuerpo fue hallado solo tras el retroceso de las aguas.
Las autoridades de Protección Civil de Jalisco confirmaron que un soldado que participaba en las labores de auxilio sufrió un accidente por electrocución. Afortunadamente, se reporta que su estado es estable tras ser hospitalizado.
A medida que Puerto Vallarta comienza a recuperarse de este desastre natural, la atención se centra en la reconstrucción y el apoyo a las familias afectadas. Es crucial asegurar que reciban la ayuda necesaria para afrontar este difícil periodo.
