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La tormenta que desbordó el conurbano
Este fin de semana, una tormenta implacable azotó el conurbano y La Plata, dejando a su paso un rastro de caos y desolación. Las imágenes de calles anegadas y casas inundadas se multiplicaron en las redes sociales, reflejando la gravedad de la situación.
A medida que las lluvias continuaban, el Servicio Meteorológico Nacional emitió un alerta naranja, advirtiendo que las condiciones climáticas no mejorarían en el corto plazo.
Las localidades más afectadas
Entre las zonas más perjudicadas se encuentran Avellaneda, Dock Sud y varios barrios de La Plata.
En estos lugares, los vecinos enfrentan la angustiante realidad de tener que evacuar sus hogares debido a la acumulación de agua. En La Plata, se reportaron al menos 12 evacuaciones, mientras que en Avellaneda, las calles se convirtieron en ríos intransitables.
La queja generalizada entre los residentes es que las bocas de tormenta están obstruidas, lo que impide que el agua drene adecuadamente, incluso cuando la lluvia disminuye.
La frustración de los vecinos
Los testimonios de los afectados son desgarradores.
Muchos expresan su desesperación ante la falta de acción por parte de las autoridades. “Esto no acaba nunca”, comenta un vecino de Avellaneda, quien ha tenido que dejar su auto a varias cuadras de su casa para evitar que sea arrastrado por la corriente.
La situación es recurrente y, a pesar de las promesas de obras para mejorar el drenaje, los problemas persisten. “Es una vergüenza”, dice una vecina de La Plata, quien denuncia que las autoridades solo aparecen para sacarse fotos y no toman medidas efectivas para solucionar el problema.
Recomendaciones ante la emergencia
Ante esta situación crítica, las autoridades han instado a los ciudadanos a circular con precaución y a mantenerse informados sobre la evolución del clima. La Defensa Civil ha estado monitoreando la situación, aunque hasta el momento no se han reportado evacuaciones masivas en el centro de Berisso. Sin embargo, las calles continúan inundadas y muchos hogares están afectados. La comunidad se encuentra en un estado de alerta, esperando que la tormenta cese y que las autoridades finalmente tomen medidas concretas para abordar esta crisis que parece no tener fin.
