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La guerra comercial y sus efectos globales
En un mundo cada vez más interconectado, las tensiones comerciales han comenzado a marcar el rumbo de las economías. La reciente publicación de la OCDE sobre perspectivas económicas para 2025 revela un panorama sombrío, donde la guerra comercial impulsada por Donald Trump se erige como un factor determinante.
Se estima que el crecimiento global se reducirá a un 3,1% este año, una caída respecto al 3,3% pronosticado anteriormente. Este fenómeno no solo afecta a las grandes potencias, sino que también repercute en economías emergentes como la brasileña.
El impacto en Brasil
Para Brasil, la OCDE proyecta un crecimiento de solo 2,1% en 2025, inferior al 2,3% que esperaba el Ministerio de Hacienda. Este descenso se atribuye a la presión de tarifas más altas sobre las exportaciones de acero y aluminio hacia Estados Unidos, así como a un endurecimiento de la política monetaria.
La situación se complica aún más con un pronóstico de 1,4% para el año electoral de 2026, lo que pone en jaque la estabilidad económica del país.
Riesgos de inflación y tasas de interés
La OCDE también advierte sobre el riesgo de un aumento en la inflación y las tasas de interés a nivel global.
En este contexto, Brasil y Japón son excepciones, ya que sus bancos centrales han tomado medidas proactivas. Sin embargo, la incertidumbre geopolítica y política actual plantea riesgos significativos para las proyecciones económicas. La producción global podría caer un 0,3% en los próximos años, mientras que la inflación podría aumentar en 0,4 puntos porcentuales anuales, afectando a la mayoría de los países del G20.
El futuro incierto de la economía mundial
La fragmentación de la economía global se presenta como una preocupación fundamental. Más barreras comerciales no solo afectarían el crecimiento, sino que también incrementarían la inflación. En este sentido, la OCDE enfatiza la necesidad de que los gobiernos colaboren para abordar las preocupaciones dentro del sistema de comercio global y evitar un aumento significativo de las barreras comerciales. Un nuevo aumento de restricciones comerciales podría tener efectos negativos profundos en los estándares de vida, lo que subraya la urgencia de una respuesta coordinada.
Recomendaciones para enfrentar la crisis
Ante este panorama, la OCDE sugiere que los gobiernos implementen acciones fiscales decisivas para garantizar la sostenibilidad de la deuda y preservar el espacio para reaccionar ante futuros choques económicos. Además, se recomienda reformar regulaciones que fomenten la competitividad del mercado, eliminando cargas regulatorias y promoviendo la inversión en educación. Estas medidas son cruciales para adaptarse a un entorno económico en constante cambio y para asegurar un crecimiento sostenible en el futuro.
