Hockey en México: del escepticismo a la oportunidad

Hace 15 años, me quedé boquiabierto al encontrar una pista de hockey sobre hielo en un centro comercial en México. Al principio, pensé que era solo una idea pasajera, un capricho más para atraer familias. Pero, con el tiempo, he sido testigo del crecimiento del hockey en el país. En este artículo, vamos a explorar cómo ha evolucionado este deporte en México, los retos que enfrenta y las oportunidades que se presentan, todo gracias a la dedicación de personas como Joaquín de la Garma, presidente de la Federación Mexicana de Hockey sobre Hielo.

Un desafío en un país amante del fútbol

Introducir el hockey en México no ha sido tarea fácil. ¿Quién puede negar que el fútbol es el rey indiscutible en el país? Y el béisbol no se queda atrás, siendo el segundo favorito de muchos. Joaquín de la Garma, un arquitecto que se ha convertido en un líder del hockey, recuerda que al inicio de su mandato, la federación apenas contaba con 600 a 700 miembros. Hoy, esa cifra ha crecido a alrededor de 5,000. ¿Cómo se ha logrado esto? Todo ha sido fruto de un esfuerzo constante por promover el hockey entre los jóvenes y universitarios.

Los datos son claros: hay un aumento en el interés por el hockey. A medida que las nuevas generaciones se involucran con el deporte, su curiosidad se despierta. De la Garma menciona que la colaboración con equipos de la NHL, como los Dallas Stars, ha sido clave. Estas alianzas no solo ofrecen clínicas de hockey, sino que también proporcionan equipos y recursos, facilitando así el acceso de los jóvenes jugadores al deporte.

Lecciones aprendidas de éxitos y fracasos

He visto demasiadas startups fallar por no adaptarse a su mercado. El hockey en México enfrenta un camino similar. La federación ha aprendido valiosas lecciones de torneos como la Silver Stick, donde, aunque el nivel de competencia es alto, cada partido se convierte en una oportunidad de aprendizaje. De la Garma enfatiza que cada juego y cada clínica contribuyen al desarrollo de habilidades y al fortalecimiento del equipo.

La historia del hockey mexicano no está exenta de fracasos. Cada tropiezo ha sido una lección que ha permitido afinar estrategias y mejorar la visibilidad del deporte. Un claro ejemplo de este progreso es la reciente victoria de la selección sub-18 en el Campeonato Mundial de Hockey Masculino, que demuestra que, a pesar de las dificultades, se están logrando resultados tangibles. La organización de eventos ha permitido no solo elevar el nivel de juego, sino también generar entusiasmo entre los aficionados locales, lo que se traduce en un aumento en la venta de entradas y un interés creciente por el hockey.

El futuro del hockey en México

A medida que el hockey en México sigue evolucionando, es vital reconocer el papel que juegan las infraestructuras y el acceso al deporte. Hoy en día, el país cuenta con 16 pistas de hockey, muchas en ciudades clave como la Ciudad de México y Monterrey. Estas instalaciones no solo son espacios de competición, sino también lugares donde los niños pueden familiarizarse con el deporte, algo fundamental para cultivar nuevos talentos.

De la Garma tiene una visión clara: convertir el hockey en un deporte universal en América, y no solo limitado a Canadá y Estados Unidos. Esto requerirá tiempo, esfuerzo y la disposición de competir con naciones que ya tienen un legado en este deporte. La federación está trabajando para atraer jugadores extranjeros, lo que podría elevar el nivel de competencia en el país. Sin embargo, es esencial que este crecimiento sea sostenible y se base en una estructura sólida que fomente tanto el interés como el desarrollo de los atletas.

El hockey en México se encuentra en una encrucijada. Con el apoyo de instituciones y el creciente interés de la población, hay motivos para ser optimistas. Si se gestionan bien las estrategias, los próximos años podrían traer consigo un aumento significativo en la popularidad y el desarrollo del hockey en el país. La clave será garantizar que este crecimiento se base en un compromiso real con el desarrollo del deporte y una estrategia sólida que lo respalde.