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El miércoles, las autoridades de Georgia anunciaron un importante avance en el caso de un estudiante desaparecido de la Universidad de Auburn.
Hallan los restos óseos de un estudiante de la Universidad de Auburn desaparecido hace 45 años
Se había encontrado un vehículo perteneciente a Kyle Clinkscales, desaparecido desde 1976. Restos, junto con su cartera fueron localizados dentro de su vehículo de dos puertas que fue encontrado sumergido en un arroyo en LaFayette, Alabama.
La Oficina de Investigación de Georgia investigará los restos, que se cree que son humanos.
El 27 de enero de 1976, Kyle dejó su trabajo en el Moose Club, un bar, en su ciudad natal de LaGrange, Georgia, y se dispuso a regresar a la Universidad de Auburn, en Alabama. Sin embargo, el joven de 22 años nunca regresó al campus.
A pesar de que siempre se mantuvo en contacto con sus padres, su padre creyó en un principio que lo había dejado todo por su bajo rendimiento escolar.
La familia de Kyle y la policía nunca renunciaron a buscarlo
«Durante 45 años, hemos buscado a este joven y su coche. Drenamos lagos. Hemos buscado por aquí y por allá y siempre ha salido nada», dijo el sheriff del condado de Troup, James Woodruff.
El martes, un hombre llamó al 911 para informar de un coche en un arroyo de Alabama.
Los agentes del condado de Chambers respondieron y encontraron un vehículo sumergido en el agua.
Sacaron el coche y descubrieron que tenía una etiqueta del condado de Troup. Los diputados se pusieron en contacto con los funcionarios de ese condado y pudieron confirmar que el vehículo era un Ford Pinto Runabout de 1974.
El vehículo sumergido
En el interior del vehículo también se encontró una cartera con información de identificación y restos óseos.
Desgraciadamente, los padres de Kyle murieron sin llegar a saber lo que le ocurrió a su hijo. Su padre, que escribió un libro sobre su desaparición, murió en 2007, y la madre de Kyle murió en 2021.
«Siempre tuvo la esperanza de que él volviera a casa. Siempre fue nuestra esperanza que lo encontráramos por ella», dijo el sheriff.
Pero ahora los funcionarios se quedan con más preguntas que esperan responder.
«¿Cuántos huesos encontrarán? ¿Encontrarán un cráneo? ¿Algo que podamos llevar al laboratorio de criminalística y determinar si hubo juego sucio? ¿Fue asesinado y dejado allí? ¿O se salió de la carretera y naufragó? Son cosas que esperamos descubrir», dijo Woodruff.
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