Esta madrugada ha saltado la noticia del estallido de la guerra en Ucrania, un conflicto que pone en grave riesgo a 7,5 millones de niños en todo el país. Save the Children dijo. «Desde el lunes, 100.000 personas ya han tenido que abandonar sus hogares en el este del país», explica la organización, que lleva más de 100 años luchando por salvar a los niños en peligro y garantizarles un futuro.
Por lo tanto, hay 7,5 millones de «niños en Ucrania en grave peligro de sufrir daños físicos, graves trastornos psicológicos y desplazamientos, como resultado de las hostilidades que se produjeron en la madrugada», dice Save the Children. «Se han escuchado explosiones en la capital, Kiev, y en otras ciudades importantes como Kharkiv, lo que ha obligado a niños y familias a encerrarse en sótanos y refugios antiaéreos.
Los padres informan de que han intentado calmar a sus hijos aterrorizados. Otras miles de personas huyen de la capital, sobre todo en coche. Las temperaturas en Kiev caen bajo cero y los niños desplazados corren el riesgo de enfrentarse a largas noches y días expuestos a condiciones brutales».
Millones de niños están en peligro por fuego cruzado en Ucrania
Hacemos un llamamiento urgente a todas las partes del conflicto para que acuerden un cese inmediato de las hostilidades, a fin de reducir el riesgo para la vida y el bienestar de los niños.
Mientras duren las hostilidades, todos los actores deben cumplir las obligaciones que les impone el derecho internacional humanitario, entre otras cosas garantizando la protección de la población civil y de las infraestructuras civiles, en particular las escuelas y los hospitales, frente a los ataques.
El uso de armas explosivas en zonas pobladas corre el riesgo de causar graves daños a los civiles, especialmente a los niños, y debe evitarse a toda costa.
Save of the Children manifestó su preocupación por los desplazamientos
«Los niños de Ucrania están atrapados en el fuego cruzado de esta guerra librada por los adultos. Nunca debería haber llegado a esto. Nuestra preocupación más inmediata es el riesgo para su salud y bienestar. En los conflictos, todo es posible: muerte, lesiones, violencia sexual, riesgos de protección. Los niños están aterrorizados. Oyen explosiones y se les pide que huyan sólo con la ropa que llevan puesta. No se puede subestimar el riesgo para su salud mental y el posible trauma a largo plazo», dijo Irina Saghoyan, directora de Save the Children para Europa del Este.
«También nos preocupan gravemente los desplazamientos y el consiguiente aumento de las necesidades humanitarias. Cualquier familia que se vea obligada a abandonar su hogar necesita todo tipo de ayuda, refugio, alimentos, agua potable, lo más básico. También estamos al final del invierno, con temperaturas regularmente bajo cero. Muchos niños que viven en esta zona de conflicto no tienen suficientes alimentos para comer ni ropa para calentarse. La idea de que muchos de ellos puedan verse obligados a encontrar refugios inadecuados en caso de desplazamiento masivo -donde estarán expuestos a la lluvia helada, el viento y la nieve- es increíblemente angustiosa», añadió Saghoyan.
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