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El impacto del temporal en Bahía Blanca
El reciente temporal que azotó Bahía Blanca ha dejado una huella profunda en la comunidad. Las imágenes de la devastación han recorrido las redes sociales, mostrando la magnitud de los daños.
En medio de esta tragedia, Franco Colapinto, un joven piloto argentino, ha decidido actuar. A través de sus historias de Instagram, ha hecho un llamado a sus seguidores para que se unan a una campaña solidaria destinada a ayudar a los afectados.
La conexión de Franco con Bahía Blanca es personal; es la ciudad donde nació su padre, Aníbal, y donde él mismo ha pasado momentos significativos de su vida.
La campaña solidaria en marcha
Franco ha compartido información sobre cómo realizar donaciones al Hospital Penna, que ha sufrido graves daños y ha tenido que evacuar a sus pacientes, incluyendo a bebés prematuros en su unidad de neonatología.
En sus mensajes, el piloto enfatiza que incluso las contribuciones más pequeñas son valiosas. «No duden si es algo chiquito, si es poca ropa o comida. Todo va a servir un montón», expresó con un tono de urgencia y empatía.
La campaña, liderada por su padre, busca recolectar productos de primera necesidad, como alimentos, productos de limpieza y medicamentos, que son escasos en la región.
La solidaridad argentina en tiempos de crisis
Aníbal Colapinto, el padre de Franco, ha tomado la iniciativa de organizar la colecta de donaciones en San Andrés de Giles.
En una entrevista, destacó la capacidad de los argentinos para unirse en momentos de crisis. «El argentino tiene muchas contras, pero en lo que respecta a ser solidario, somos los 1 en el mundo», afirmó. La situación en Bahía Blanca es crítica, y Aníbal ha compartido su preocupación por los familiares que aún residen allí. La comunidad se enfrenta a desafíos enormes, y la respuesta solidaria es crucial para ayudar a quienes lo han perdido todo.
Un llamado a la acción
La campaña de Franco y Aníbal no solo busca recolectar donaciones, sino también inspirar a otros a actuar. La respuesta de la comunidad ha sido abrumadora, con personas de todas las edades contribuyendo de diversas maneras. Desde empresarios hasta jóvenes, todos están aportando su granito de arena. Franco, aunque lejos, se siente impotente por no poder estar presente, pero su compromiso con su ciudad natal es inquebrantable. La solidaridad se ha convertido en un faro de esperanza en medio de la adversidad, y cada acción cuenta en la reconstrucción de Bahía Blanca.
