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El pedófilo «despreciable» que se vistió de vampiro en su propia boda es encarcelado durante 12 años

El pedófilo «despreciable» que se vistió de vampiro en su propia boda es encarcelado durante 12 años

Billy Bradshaw, padre de cuatro hijos, de 31 años, de Derbyshire, abusó de las jóvenes durante una década, dejando a sus víctimas traumatizadas, y una de ellas admitió que «no podía soportar vivir en mi propia piel» y que había intentado quitarse la vida a causa de sus viles crímenes, el pedófilo ha sido encarcelado por 12 años.

Pedófilo «despreciable» que se vistió de vampiro en su propia boda es encarcelado durante 12 años

Billy Bradshaw, padre de cuatro hijos, que se disfrazó de vampiro para su propia boda, abusó de las jóvenes durante una década.

Finalmente fue detenido cuando dos niñas denunciaron los abusos a la policía en 2019. Posteriormente, otras tres víctimas se presentaron valientemente alegando que también había abusado de ellas cuando eran niñas.

Bradshaw, de 31 años y sin domicilio fijo, negó los delitos y llevó el asunto a juicio, obligando cruelmente a sus víctimas a revivir sus experiencias en la sala.

A pesar de sus negativas, el jurado del Tribunal de la Corona de Derby tardó sólo 90 minutos en declararlo culpable de todos los delitos de los que se le acusaba.

Varias de sus víctimas acudieron al tribunal para enfrentarse valientemente a su agresor, que fue encarcelado durante más de una década por sus viles crímenes el viernes 7 de enero.

Barnaby Shaw, el fiscal, describió el devastador efecto de las víctimas de Bradshaw en sus declaraciones ante el tribunal.

Una de ellas dijo que se le había diagnosticado un trastorno de estrés postraumático y que, como consecuencia, sufría ansiedad y depresión.

«Sólo quería que dijera la verdad sobre lo ocurrido», dijo.

«Cuando me enteré de que se había declarado inocente, me quedé destrozada. Quería que dijera la verdad».

«Quiero una vida normal, siento que es poco probable que esto ocurra por lo que me hizo».

Otra víctima dijo que odiaba las cosas que le recordaban a él, como el alcohol, el mentol y Halloween, un evento estacional que le gustaba tanto que tuvo una boda con temática de Halloween.

Dijo: «Me deprimía y me sentía indigna. Ha tenido un efecto devastador en mi familia.

«Veo el dolor en los ojos de mi madre al sentir que no me protegía lo suficiente y la rabia en los de mi padre».

Otra de sus víctimas dijo que echaba de menos a la persona que solía ser antes del incidente.
«Después de lo que me pasó no podía soportar vivir en mi propia piel. Intenté quitarme la vida por lo que pasó».

«Intento cortar el dolor físicamente de mi piel. No me gusta cómo se siente mi cuerpo.

«Tengo ataques de rabia que no puedo controlar.

«Espero que algún día pueda llevar una vida normal. Quiero ser la persona que era antes de que pasara todo esto y no como soy ahora».

Todas las víctimas dijeron que ya no confiaban en los hombres y que no soportaban el contacto físico, como los abrazos o que la gente las tocara.

Fue declarado culpable de tres cargos de atentado al pudor contra una menor de 16 años, tres cargos de actividad sexual con una niña, un cargo de agresión a una menor de 13 años por penetración, un cargo de agresión sexual a una menor de 13 años y un cargo de provocar/incitar a una menor de 13 años a participar en actividades sexuales.

Ian Way, abogado defensor de Bradshaw, dijo que no podía ofrecer «ninguna atenuación real» por el delito, pero añadió que su cliente tenía problemas de salud como depresión, ansiedad y gota.
«Él sabrá que al tener un juicio se ve privado de cualquier descuento o crédito», dijo.

«Lo que quizá sea el factor más significativo para él es que es padre de cuatro niños pequeños, no los verá ni tendrá contacto con ellos durante un tiempo considerable.

«La sentencia es inevitablemente de custodia medida en años, no en meses.

«Hay muy poco más que pueda decir».

El juez Adrian Reynolds dijo que el delito de Bradshaw era «despreciable».

«Usted tuvo la oportunidad de pensar en su esposa e hijos cuando decidió si iba a admitir lo que había hecho», dijo.

«No mostraste ninguna compasión por ellos [sus víctimas], no te daré ninguna porque no la mereces.

«Si dictara las sentencias que merecen tus delitos individuales y las hiciera consecutivas, por muy tentador que sea, la sentencia global sería desproporcionada. Eso puede ser difícil de entender para sus víctimas».

Describiendo sus acciones como «atroces», el juez Reynolds dijo que había destrozado las vidas de sus víctimas.

Añadió que una de las víctimas dijo conmovedoramente cómo «su dignidad y su alma fueron robadas por lo que usted hizo» y que otra había intentado quitarse la vida.

Encarceló a Bradshaw por un total de 12 años, con un período de licencia ampliado de un año más. También ordenó que firmara en el registro de delincuentes sexuales de por vida y le impuso una orden de prevención de daños sexuales hasta nueva orden.

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