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Un ícono del heavy metal
El Boeing 747-400, conocido como Ed Force One, ha sido un símbolo de la banda británica Iron Maiden desde su primera aparición en la gira «The Book of Souls» en 2016. Este avión no solo transportó a los miembros de la banda, sino que también se convirtió en un elemento central de su identidad visual. Pilotado por el vocalista Bruce Dickinson, el Ed Force One fue adaptado y pintado con un diseño que reflejaba la estética única de Iron Maiden, incluyendo la famosa figura de Eddie, su icónica mascota.
Transformación en objetos de colección
Tras su desmantelamiento en 2022, el Ed Force One ha encontrado una nueva vida a través de la empresa alemana Aviationtag, que ha convertido partes de la fuselaje en etiquetas de bagaje coleccionables. Cada etiqueta es única, preservando fragmentos de la pintura original y, en algunos casos, incluso partes de la cola del avión donde estaba estampada la imagen de Eddie. Estos artículos no solo son un recuerdo de la gira, sino que también representan un pedazo de la historia del heavy metal, permitiendo a los fans llevar consigo un trozo del legado de Iron Maiden.
Un precio simbólico para los fans
Las etiquetas están disponibles por un precio de 66,66 libras (aproximadamente R$ 414), un guiño al tercer álbum de la banda, «The Number of the Beast», lanzado en 1982. Este precio no es solo una referencia a un álbum icónico, sino que también resuena con la cultura de los coleccionistas, quienes valoran la conexión emocional con la música y la historia de sus bandas favoritas. La posibilidad de poseer un objeto que ha estado en contacto con la banda y su legado es un atractivo irresistible para muchos.
Un legado que perdura
El Ed Force One no solo fue un medio de transporte, sino que se convirtió en un símbolo de la dedicación y el amor que Iron Maiden tiene por sus fans. La transformación de este avión en objetos de colección es un testimonio de cómo la cultura del rock sigue evolucionando, permitiendo a los seguidores conectarse de maneras nuevas y emocionantes. A medida que los fans adquieren estas etiquetas, no solo están comprando un objeto, sino que están invirtiendo en una parte de la historia del heavy metal que perdurará por generaciones.
