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Un déficit comercial récord
Recientemente, se han publicado datos alarmantes sobre el déficit comercial de Estados Unidos, que alcanzó un récord de 131,4 mil millones de dólares en enero de 2023. Este aumento se debe, en gran parte, a que las empresas se apresuraron a importar mercancías antes de la implementación de nuevas tarifas.
Esta situación ha generado preocupación en el ámbito económico, ya que un déficit elevado puede tener repercusiones significativas en el Producto Interno Bruto (PIB) del país.
El efecto en el PIB
El PIB se calcula restando las importaciones de las exportaciones, lo que significa que un aumento en el déficit comercial puede llevar a una disminución en las proyecciones de crecimiento económico.
El modelo GDPNow del Federal Reserve de Atlanta, que estima el crecimiento del PIB en tiempo real, ha mostrado una contracción del 2,8%, revisada posteriormente a -1,6%. Este tipo de datos puede generar titulares alarmantes y una percepción negativa sobre la salud económica del país.
Importaciones de oro y su impacto
Un factor clave en este aumento del déficit ha sido el incremento masivo en las importaciones de oro. Los comerciantes han estado anticipando posibles tarifas, lo que ha llevado a un aumento en las importaciones de este metal precioso.
A diferencia de otros bienes, el oro no se consume ni se utiliza en la producción, lo que significa que su impacto en el PIB es diferente. Según David Mericle, economista de Goldman Sachs, la mayor parte del aumento en el déficit comercial se debe a estas importaciones de oro, que no contribuyen al crecimiento económico de la misma manera que otros bienes.
Perspectivas futuras
A pesar de la situación actual, algunos economistas creen que el impacto negativo del déficit comercial podría ser temporal. Se espera que las importaciones se normalicen en el segundo trimestre de 2023, lo que podría llevar a una recuperación en el crecimiento del PIB. La clave será observar cómo se comportan las importaciones y si se produce un aumento compensatorio en la acumulación de inventarios. La incertidumbre económica sigue siendo un factor a considerar, pero las proyecciones ajustadas al oro sugieren que el crecimiento podría ser más optimista de lo que inicialmente se pensaba.
