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El contexto actual del DNU
En un clima político tenso, el oficialismo argentino se prepara para una sesión crucial en la Cámara de Diputados, donde se discutirá el DNU firmado por Javier Milei en acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Este decreto, que busca renegociar las condiciones del préstamo otorgado por el FMI, ha generado un intenso debate entre los diferentes bloques políticos. La sesión, programada para las 10 de la mañana, es vista como una oportunidad para que La Libertad Avanza (LLA) logre el quórum necesario, confiando en contar con al menos 130 votos a favor.
Las estrategias del oficialismo
El oficialismo ha movilizado a sus aliados y a legisladores que responden a gobernadores para asegurar el respaldo necesario. Con 39 legisladores propios de LLA y 37 del PRO, el oficialismo se siente optimista. Sin embargo, la incertidumbre persiste, especialmente con los legisladores de Unión por la Patria, que cuentan con 98 diputados y han manifestado su intención de rechazar el DNU.
La situación se complica aún más con la posibilidad de que algunos legisladores, tradicionalmente alineados con el kirchnerismo, decidan apoyar al gobierno, lo que podría cambiar el rumbo de la votación.
El papel de los bloques opositores
La oposición, liderada por Unión por la Patria, se ha mostrado firme en su rechazo al DNU.
Sin embargo, hay otros bloques que han expresado su apoyo, como la Coalición Cívica, cuyos seis diputados han decidido autorizar la renegociación con el FMI, argumentando que la responsabilidad recae en el Poder Ejecutivo. Además, la UCR y otros grupos como Innovación Federal están en conversaciones para definir su postura, lo que podría influir en el resultado final de la votación.
La presión por avanzar rápidamente en la aprobación del DNU se debe a la inestabilidad en los mercados y a la proximidad de feriados que complicarían futuras sesiones.
