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Un gigante en el horizonte de Pyongyang
En el corazón de Pyongyang, el Hotel Ryugyong se erige como un coloso de concreto que ha capturado la atención de muchos. Con 105 pisos y más de 300 metros de altura, esta estructura piramidal fue concebida durante la Guerra Fría como un símbolo del poderío norcoreano.
Sin embargo, a pesar de su imponente presencia, el hotel nunca ha recibido a un solo huésped desde que se inició su construcción en 1987.
Un proyecto ambicioso que se convirtió en un fiasco
El Hotel Ryugyong fue diseñado para ser uno de los centros de lujo más grandes del mundo, con capacidad para 3,000 habitaciones y ocho restaurantes giratorios que ofrecerían vistas espectaculares de la ciudad.
La inauguración estaba prevista para 1989, pero la caída de la Unión Soviética en 1991 truncó esos planes. La crisis económica que siguió, junto con problemas técnicos, llevó a que el proyecto se detuviera, convirtiendo al hotel en un símbolo de la decadencia económica de Corea del Norte.
Un destino turístico inexplorado
A pesar de su estado inacabado, el Hotel Ryugyong ha atraído la curiosidad de algunos aventureros y expertos en viajes. Simon Cockerell, director de una agencia de viajes especializada en Corea del Norte, tuvo la oportunidad de explorar parte de la estructura.
Su experiencia fue impactante: desde un vestíbulo de cemento sin revestimiento hasta un ascensor antiguo que lo llevó al piso 99. La vista desde la cima era impresionante, pero el ambiente del lugar era casi apocalíptico, evocando una sensación de abandono y desolación.
El futuro del Hotel Ryugyong
En 2008, se reanudaron los trabajos en el exterior del hotel con la instalación de paneles de vidrio, pero el futuro del Ryugyong sigue siendo incierto. Se estima que completar la construcción podría costar alrededor de 2,000 millones de dólares, una cifra que plantea dudas sobre la viabilidad del proyecto en medio de la crisis económica que enfrenta el país. A pesar de los esfuerzos por revitalizar el hotel, su historia sigue siendo un recordatorio de las ambiciones no cumplidas de Corea del Norte.