En un contexto de creciente tensión entre Colombia y Estados Unidos, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha decidido instaurar un paro de 72 horas en varias ciudades y regiones bajo su control. Esta medida, que comenzó el domingo a las 6:00 AM, busca protestar contra lo que el grupo guerrillero califica como «amenazas de intervención imperialista» por parte del presidente estadounidense, Donald Trump.
La decisión del ELN de paralizar actividades en estas áreas se produce en medio de un clima de incertidumbre política y social. Este grupo, que mantiene presencia en más del 20% de los más de 1,100 municipios de Colombia, ha alertado sobre un posible aumento en la intervención militar estadounidense en el país. Trump no ha descartado la posibilidad de atacar suelo colombiano para combatir el narcotráfico.
Contexto del paro del ELN
El ELN es conocido por ser la guerrilla más antigua de América Latina y ha estado involucrado en múltiples negociaciones de paz a lo largo de su historia. Sin embargo, las conversaciones con el gobierno del presidente Gustavo Petro se rompieron en enero debido a la reanudación de las hostilidades. En este sentido, el grupo ha decidido tomar medidas drásticas, como el paro, para manifestar su resistencia ante lo que consideran un intento de neocolonialismo por parte de Estados Unidos.
Detalles del paro
Durante el paro, el ELN ha impuesto restricciones significativas en la movilidad de los civiles. Las actividades comerciales están suspendidas y se prohíbe el tránsito por carreteras y ríos navegables. A través de un comunicado divulgado en sus redes de propaganda, el grupo advirtió que es crucial que los civiles eviten el contacto con fuerzas militares para prevenir incidentes. Esta estrategia tiene como objetivo consolidar su control sobre las áreas donde operan, especialmente en regiones clave para la producción de narcóticos.
El ministro de Defensa de Colombia, Pedro Sánchez, ha rechazado categóricamente las acciones del ELN, calificándolas de «constreñimiento criminal». Afirmó que la fuerza pública estará presente en todos los rincones del país para garantizar la seguridad y el orden durante este periodo complicado.
Reacciones a las amenazas de Trump
A medida que las tensiones aumentan, el presidente colombiano se enfrenta a las advertencias de Trump. El mandatario ha exigido que su homólogo estadounidense respete la soberanía del país y no amenace con intervención militar. Estas tensiones han llevado a una crisis diplomática entre Bogotá y Washington, marcando un punto bajo en la relación que ha existido durante décadas.
Implicaciones del conflicto
El ELN no solo ha manifestado su rechazo a las amenazas de Trump, sino que también ha denunciado lo que consideran un intento de “saqueo” de los recursos naturales de Colombia. Las advertencias de intervención han intensificado los debates sobre el narcotráfico, dado que Colombia es el mayor productor mundial de cocaína, según la ONU. En este contexto, el ELN ha hecho un llamado a la resistencia, argumentando que su lucha es por la defensa del país frente a intereses externos.
Las acciones del ELN y la respuesta del gobierno colombiano son parte de un ciclo continuo de conflicto que ha marcado la historia reciente del país. Con el ELN controlando áreas estratégicas y la presión externa aumentando, el futuro político y social de Colombia se presenta incierto, lo que podría tener consecuencias significativas tanto a nivel nacional como internacional.


