El cierre de la unidad de la Fundación Casa El pasado viernes, la Fundación Casa, anteriormente conocida como Febem, anunció el cierre de su unidad en Vila Maria, en la zona norte de São Paulo. Esta decisión fue motivada por una reducción significativa en el número de adolescentes que ingresan a las unidades desde 2019, resultando en solo un 37% de la capacidad ocupada.
La Fundación justificó la medida como parte de una «readecuación planificada» para mejorar las condiciones de atención y optimizar la gestión de las unidades. Transferencia de los adolescentes y seguimiento familiar Los adolescentes que se encontraban en la unidad fueron trasladados a otros centros socioeducativos, teniendo en cuenta la preferencia de las familias y la disponibilidad de plazas.
La Fundación Casa destacó que todo el proceso se realizó con el acompañamiento de las familias, lo cual es un aspecto positivo en medio de un escenario frecuentemente marcado por denuncias y disturbios. La red actualmente mantiene 96 unidades en funcionamiento, pero el historial de problemas en la Fundación Casa genera preocupaciones sobre la seguridad y el bienestar de los jóvenes.
Historial de disturbios y denuncias La unidad de Vila Maria no es ajena a incidentes graves. Desde su creación, la Fundación Casa ha enfrentado una serie de denuncias, incluyendo disturbios y agresiones. En 2011, un disturbio resultó en 11 heridos, y en 2017, 12 empleados fueron condenados por agredir física y mentalmente a 111 adolescentes.
Recientemente, se están investigando dos nuevas denuncias, incluyendo un caso en el que un adolescente fue encontrado desmayado y otro que involucra a jóvenes con quemaduras tras un incendio provocado por cables eléctricos. Estos incidentes plantean interrogantes sobre la seguridad y la adecuación del tratamiento ofrecido a los adolescentes infractores.
La respuesta de la Fundación Casa y la versión de los adolescentes La Fundación Casa afirmó que el equipo de la unidad intervino de acuerdo con los protocolos de seguridad durante los incidentes más recientes, y que todos los involucrados recibieron atención médica. Sin embargo, la Defensoría Pública informó que la versión presentada por los adolescentes heridos difiere de la versión de la Fundación, lo que genera aún más incertidumbres sobre la situación. La transparencia y la responsabilidad en las acciones de la Fundación Casa son cruciales para garantizar la protección y el tratamiento adecuado de los jóvenes bajo su custodia.