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Un hallazgo sorprendente en el Bajo Flores
En un operativo reciente, la Policía de la Ciudad detuvo a un joven de 18 años en el barrio del Bajo Flores, un área conocida por su actividad delictiva. El adolescente, que supuestamente se dirigía a clases, llevaba en su mochila una cantidad alarmante de droga: 1.383 paquetes de pasta base, cuidadosamente envueltos en papel violeta y ocultos entre sus útiles escolares.
Este incidente no solo pone de relieve la problemática del narcotráfico en la zona, sino que también plantea preguntas sobre la seguridad y el bienestar de los jóvenes en contextos vulnerables.
El momento de la detención
El arresto se produjo en el cruce de las calles Ana María Janer y Charrúa, cerca de la cancha de San Lorenzo y Deportivo Riestra.
Según informes, el Escuadrón V del Despliegue de Intervenciones Rápidas (DIR) notó un comportamiento sospechoso en el joven, quien cambió de dirección de manera abrupta al ver a los oficiales. Este gesto levantó las sospechas de los agentes, quienes decidieron identificarlo y realizar una requisa en presencia de testigos.
En la mochila, además de los paquetes de droga, se encontraron dos mil pesos y una carpeta estudiantil, lo que añade un matiz inquietante a la situación.
Las implicaciones legales del caso
Una vez que se confirmó la naturaleza de la sustancia mediante un test químico, el resultado fue positivo, lo que llevó a la detención formal del joven.
Este hecho lo expone a una posible condena de entre seis meses y tres años de prisión efectiva, según la ley 23.737, que regula el tráfico de drogas en Argentina. La difusión del video del arresto por parte de la Policía de la Ciudad ha generado un debate en las redes sociales sobre la criminalización de los jóvenes y las circunstancias que los llevan a involucrarse en actividades delictivas.
Este caso es un recordatorio de la necesidad de abordar la problemática del narcotráfico desde una perspectiva integral, que incluya educación y prevención.