En una sorprendente operación, la policía municipal de Apaseo el Alto en Guanajuato arrestó a once miembros de la Guardia Nacional durante un intento de robo de combustible. La situación se desató alrededor de la medianoche del sábado, cuando las autoridades respondieron a una llamada al 911 que alertaba sobre actividades sospechosas en una tubería de Pemex. Al llegar al lugar, los oficiales encontraron a los sospechosos resguardando una toma de combustible ilegal.
Detalles del operativo y la detención
Los elementos de la Guardia Nacional fueron sorprendidos en pleno acto delictivo, con un camión cisterna siendo abastecido de combustible extraído de la tubería. Cuando los policías interrogaron a uno de los guardias que estaba al volante del camión, este alegó que su unidad estaba allí para proporcionar seguridad. Sin embargo, al encender el motor, intentó huir, lo que llevó a los oficiales a actuar rápidamente.
El operativo concluyó con la detención de tres oficiales, dos de los cuales estaban vestidos de civil, y ocho soldados de tropa. Tras una inspección, se confirmó que estaban involucrados en el robo de combustible. Algunos soldados lograron escapar, pero los once detenidos y sus armas fueron entregados a la Fiscalía General de la República. Además, se aseguraron el camión cisterna y varios vehículos militares en la escena, incluyendo dos camionetas pickup.
La magnitud del robo de combustible en México
El robo de combustible, conocido en México como huachicoleo, ha sido un problema persistente para Pemex, la empresa estatal de petróleo. En los últimos 15 años, este delito ha crecido de manera alarmante, costando a la empresa aproximadamente 900,000 dólares diarios. Este tipo de actividades no solo afecta a la empresa, sino que también representa una significativa evasión fiscal, con pérdidas de alrededor de 24 millones de dólares diarios el año pasado, según cifras de PetroIntelligence.
Las autoridades han señalado que algunas empresas transnacionales evaden impuestos a través de maniobras fraudulentas, reportando gasolina y diésel como aceites vegetales o lubricantes, lo que les permite evitar el impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS). Esto ha resultado en pérdidas de ingresos para el estado que superan los mil millones de pesos por cada envío, una cifra realmente alarmante.
Reacciones y consecuencias
El Ministerio de Defensa confirmó la detención de los once miembros de la Guardia Nacional y proporcionó los nombres de los sospechosos a las autoridades. Además, se verificó que las armas y vehículos utilizados pertenecen a las fuerzas armadas. Este incidente genera inquietud sobre la integridad de las fuerzas de seguridad y el desafío que representa el huachicoleo para el país.
Las reacciones a este operativo han sido variadas, con algunos ciudadanos expresando su desconfianza en las instituciones encargadas de la seguridad pública. La necesidad de fortalecer las medidas de control y vigilancia es más evidente que nunca, en un contexto donde la corrupción y el crimen organizado parecen tener un alcance cada vez mayor.